Nada reconocemos
¿Por qué nos es tan difícil reconocer los errores que cometemos?
Cuesta asumir que los problemas de hoy son producto de decisiones pasadas como: el cambio de renta presunta a renta efectiva para algunas empresas, o la venta de tierras de pueblos originarios, o la no actualización de variables y cálculos actuariales para las pensiones, o alejar las decisiones de la comuna que es el lugar más cercano a la gente y otros ejemplos de tremendos impactos. Para qué recordar el Transantiago, el jarrón, el tren al sur.
No quiere decir que todo esté malo, pero si no identificamos y reconocemos lo mal obrado, corremos el riesgo de repetirlo y volver a desperdiciar tiempo y recursos.
Tampoco reconocemos en el otro lo bien gestionado.
Debemos destacar que es más lo que nos une (excepto algunos), pero aún no estamos en condiciones de dejar de controlar a quienes gestionan el poder por y para nosotros.
Por eso, sugiero implementar un sistema de gestión de calidad de la política para todo el sector estatal que permita a lo menos disminuir las posibilidades de mala gestión voluntaria o involuntaria.
Jorge Porter Taschkewitz
Nuevas faltas de respeto
Ya no es de extrañar con qué facilidad algunas autoridades y otros profesionales, denostan, denigran e insultan gratuitamente y públicamente a otras autoridades.
Primero fue la presidenta del Colegio Médico, quien en una entrevista trató de "infelices" a los integrantes de la mesa Covid, la que después salió dando unas excusas que ni ella se las creía.
Bueno, el jueves en el matinal de Mega, le tocó el turno al doctor Juan Espinoza (desconozco en qué hospital labora), quien con toda liviandad y falta de empatía, se refirió a estos mismos profesionales como "montón de tarados".
Es de esperar que esta no sea la misma opinión de todos los profesionales de la salud, y que solo sea un pequeño "gustito" que se dan algunos "profesionales" que les gusta más trabajar con un micrófono que con un fonendoscopio.
Óscar Montoya
Un año de teletrabajo
A un año de la llegada del COVID-19 al país son muchas las lecciones que podemos sacar, especialmente si hablamos del cambio drástico que generó en nuestra manera de trabajar. Es un hecho que la pandemia a nivel mundial sacudió al área laboral acelerando el uso de las herramientas de colaboración y el trabajo remoto.
En esa misma línea es como hemos visto cómo tráfico de internet ha seguido creciendo en Chile, de hecho, según consigna el último informe sectorial de la Subsecretaría de Telecomunicaciones, se registró un tráfico total de Internet fija de 10,7 millones de Terabytes (TB) de enero a septiembre de 2020, lo que representa un crecimiento de 57% en comparación con los 6,8 millones de TB que se registraron en el mismo periodo del 2019. Mientras que el tráfico total de Internet móvil tuvo un incremento anual de 40% llegando a 2,1 millones de TB.
Esto nos muestra el acelerado incremento del uso de tecnologías durante 2020 para dar respuesta a los desafíos que llegaron con la pandemia. A pesar de que ese era el panorama del año pasado, este 2021 no será muy diferente ya que el COVID-19 tendrá un rol protagónico. Podemos decir que el año pasado fue un año de adopción y éste nos brinda la oportunidad de habilitar correctamente esas medidas que se implementaron para mantener el negocio operativo.
Claudio Ortiz Welsch, gerente general de Cisco Chile
Señores parlamentarios
Lo que está ocurriendo estos días en el Mercosur nos debe servir de lección. Cuando en 1991 algunos pedían a toda costa que Chile ingresara como socio a este conglomerado económico y político, el Gobierno y el Parlamento de la época desecharon la idea. Una gran decisión que hoy día aplaudimos.
Digo esto porque estos días uno de los socios, Uruguay, está solicitando con urgencia flexibilidad al Mercosur y su autorización para llegar a acuerdos con otras naciones y liberalizar su economía, pero Argentina y Brasil no le autorizan. Paraguay, por su parte, reclama esa misma libertad y tampoco se lo permiten, corriendo el peligro de quedar como fósiles en un mundo que mira al futuro. Pensemos por un instante que Chile logró vacunas covid- 19 antes que muchos otros países justamente por tener lazos económicos y tecnológicos con cientos de naciones, amén de su buen historial de pago.
La lección a sacar de ambos casos, es exigir a nuestros parlamentarios que legislen mirando el bien común y de largo plazo, sin egoísmos ni cálculos electorales. Los chilenos lo merecemos y de sobra.
René Araneda A.