Las estrategias de Ñublense para su desarrollo institucional
Directivos de los Diablos Rojos se refieren al crecimiento comercial y comunicacional del club, como también a la situación que atraviesa la cantera.
El equipo ha logrado mostrar un nivel importante en su regreso a primera división.
Hoy por hoy el desafío deportivo más inmediato para Ñublense es preparar la llave de Copa Chile ante O'Higgins, con los duelos de mañana (ida) y el domingo (vuelta). En paralelo, el trabajo institucional del club no se detiene, sobre todo cuando el equipo ha ligado un buen arranque de torneo tras ascender a la división de honor del fútbol nacional.
Desde luego, el desarrollo del club, según dicen los propios directivos, se sustenta principalmente bajo los éxitos deportivos, pues con ello es más factible unir todos los otros aspectos. El gerente general del club, Hernán Rosenblum, asegura que "los resultados en cancha nos han permitido llevar de mejor forma todo lo que sucede con la pandemia. Institucionalmente, nos ha costado como a todos, ha sido bastante complejo y de mucho sacrificio. El ascenso nos permitió generar más ingresos, a sabiendas de que la Primera División también requiere más egresos y gastos".
Francisco Rossler, director de la Corporación y comisión fútbol, le suma que "en lo social queremos seguir uniendo a la región de Ñuble con la institución, continuar con los convenios sociales y las ayudas que la comunidad requiera dentro de nuestras posibilidades. En lo económico, mantener una institución con poca deuda y saneada en un corto plazo. Ojalá se nos unan más auspicios locales".
A propósito de lo anterior, el gerente de marketing del club, Marcelo Olguín, realiza un repaso de lo que han logrado en el último tiempo. "Hace cuatro años que cambiamos nuestra estrategia o políticas comerciales y comunicacionales, con el objeto de acercar más al hincha a la institución, como así también a las empresas a nivel local como nacional al club. Un ejemplo claro es que, antes de la pandemia, éramos una de las instituciones que tenía los abonos más baratos de Chile, es decir, 13 mil 500 pesos por todo el año", cuenta.
En esa línea, el encargado exterioriza que "Ñublense es el club que tiene más auspiciadores a nivel nacional, pues impulsamos una estrategia de marketing social. Prueba de ello es que en nuestra camiseta tenemos a Bomberos, Coaniquem, Techo para Chile, etcétera, donde buscamos que la empresa privada pueda estar con el club, pero con un objetivo claro que es aportar a la comunidad".
Un punto tangible tiene que ver con la respuesta del hincha diablo al actual momento que atraviesa el conjunto de Jaime García; y Olguín lo ilustra con detención. "Desde el año pasado que estamos con escasez de merchandising y camisetas en especial, porque las cosas cuando han ido llegando no duran nada. Eso se explica por el momento que vive el equipo, pues ascendió y ahora lleva una buena campaña con un cuarto lugar en el campeonato", sostiene.
Semillero
La crisis sanitaria obligó a suspender -indefinidamente- el fútbol joven chileno. Son al menos dos generaciones que se han visto perjudicadas directamente, sin embargo, los clubes se han encargado de integrar lo máximo posible a los canteranos, tanto como sparring o alternativas a los primeros equipos. En Ñublense, Rossler tiene claro que ha habido "tiempo perdido" en dicho ítem.
"Desgraciadamente, por la pandemia no se ha podido competir en las series menores. Creemos que estamos perdiendo un tiempo y generaciones importantes. Y sabemos que nuestros canteranos deben ser claves para el primer equipo, no sé si la base, pero por lo menos tener tres o cuatro jugadores formados en casa peleando una opción de ser titulares o derechamente titulares en el plantel profesional", afirma con convicción.
Asimismo, Rosenblum revela que actualmente hay un grupo de juveniles que inició entrenamientos hace un tiempo. "Hay 30 jugadores de la sub-17 y 19 que están entrenando a cargo del profesor Vicente Núñez y su staff desde hace dos meses. Tenemos cerca de 250 niños, pero eso es lo que se nos permite de manera sanitaria (…) A pesar de las críticas, sabemos que ellos no desentonan y vienen más preparados que años atrás".
Una visión más alentadora es la de Álvaro Izquierdo, también directivo del club. "El sueño de todos los equipos del fútbol chileno es que desde su semillero poder formar jugadores que puedan ser incorporados al plantel profesional. Hoy hay más de 12 jugadores juveniles incorporados al plantel de honor y que han tenido la oportunidad de debutar profesionalmente. Todo ello nos lleva a pensar que, en algunos años más, podríamos tener al menos cinco jugadores firmados en casa", expone.
Finalmente, Rosenblum también se refiere a la rama femenina. "Luego de retomar esa área, tras estar varios años detenidos, no tuvimos tiempo para competir. Tengo la intuición de que tendremos que rearmar el fútbol femenino y hacer una nueva selección con pruebas masivas, principalmente porque la Primera B está stand by".
EL equipo está en buen pie en este retorno a primera a.
Juan Pablo Ríos
felipe venegas/ñubllense