"Defensor del alumno" ante abusos y ACOSO: la nueva tendencia en europa
UNIVERSIDADES. Figura independiente se creó para enfrentar las denuncias de jóvenes investigadores que sufren racismo, intimidación o acoso por parte de sus profesores.
Agencias
El mundo está cambiando en diversos aspectos y el ámbito educacional no es la excepción. Muchas conductas antes normalizadas en las aulas actualmente no son aceptables.
En este contexto, en Europa se observa una tendencia nueva que han adoptado muchas universidades; se trata de la figura de un "defensor del alumno".
Este nuevo cargo independiente que han creado algunas casas de estudio del viejo continente tiene como principales responsabilidades escuchar y atender las denuncias de los jóvenes investigadores que dicen sufren racismo, acoso sexual, intimidación o abuso de la autoridad por parte de su supervisor.
Países Bajos son los que están a la vanguardia en esta innovación. Tanto es así que 14 universidades acordaron en un convenio colectivo, que todas deben tener un "ombudsman", como requisito legal.
El gobierno neerlandés introdujo esta obligación después de las persistentes quejas de los alumnos a la red nacional de estudiantes de doctorado y tras una serie de escándalos relacionados con un comportamiento abusivo de los profesores universitarios, un problema que se repite en diferentes centros de estudio dentro y fuera del país (ver otros casos en recuadro).
Aunque esta conducta puede afectar a estudiantes y personal de todos los niveles, los alumnos de doctorados en específico son el grupo más vulnerable, a juicio del gobierno neerlandés. Y es que las diferentes asociaciones reconocen la identificación de múltiples casos.
"Tenemos un par de casos al mes de personas que han chocado con una pared de hormigón en sus estudios de investigación. Son historias desgarradoras de personas que están siendo intimidadas o que se ven frustradas de forma deliberada en su carrera científica", señaló Rosanne Anholt, de la red nacional de estudiantes de doctorado.
Incluso detalló que les llegó el caso de un alumno que se suicidó por la presión, en parte como resultado de la relación problemática que tuvo con su supervisor.
De esta forma, se espera que la figura del "defensor" del investigador académico podría disuadir a los supervisores y tutores de este tipo de comportamientos, aunque los diputados neerlandeses han cuestionado su independencia y se han preguntado hasta qué punto denunciarán al centro que les paga, al ver que, al final, van a ser empleados de las universidades.
Para la investigadora Rosanne Anholt "un clima laboral inseguro no es bueno para la ciencia. Se ocultan los errores o se falsifica la autoría, simplemente porque estos científicos se sienten presionados para rendir".
Por último, lamentó que esta situación "hace que el umbral para una carrera en ciencias sea mucho más alto y muchos estudiantes de doctorado estén pensando en abandonar".
Encuestas y estudios
Según una encuesta realizada por la televisión pública a 400 estudiantes de doctorado, cuatro de cada diez dijeron que se habían visto en situaciones en las que se han enfrentado a su tutor o habían experimentado intimidación, racismo y acoso sexual, situaciones que dejan a muchos lidiando con problemas psicológicos durante su carrera.
Pero, ¿por qué es más frecuente entre alumnos de doctorado? El mismo estudio mostró que esos alumnos se ven especialmente afectados porque, en muchos casos, están involucrados en una investigación dirigida por su propio supervisor, cuyo prestigio ha permitido lograr una subvención para financiar un proyecto en particular del que ellos forman parte, lo que aumenta la presión y hace que el estudiante dependa completamente del tutor.
Una investigación hecha por la red nacional de profesoras también llegó a la conclusión de que la estructura jerárquica en las universidades, la cultura competitiva, los recursos insuficientes con los que cuentan los candidatos, la renuncia a criticar a sus supervisores y la falta de una respuesta adecuada a las denuncias contribuyen al problema, que deriva en ansiedad, depresión y síndrome de Burnout (trabajador quemado) entre los estudiantes.
Una denuncia en Barcelona
Dentro de los ejemplos relacionados a comportamientos abusivos en contra de estudiantes, está el caso de un grupo de alumnas de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) que denunciaron el mes pasado a un profesor por presuntas "agresiones y actuaciones de acoso e intimidación". Así lo confirmó Esther Zapater, responsable del Observatorio por la Igualdad de la UAB, que ha activado "el mecanismo de protocolo para dilucidar lo ocurrido" y tomar las medidas oportunas.
4 de 10 alumnos de doctorado en Países Bajos aseguraron que se habían visto enfrentados a situaciones de racismo, intimidación o acoso.
14 universidades neerlandesas suscribieron un convenio colectivo para tener un "defensor del alumno" ante estas situaciones.