Gobernadores y la descentralización
En su primer encuentro nacional, las nuevas autoridades de las 16 regiones criticaron la existencia de los delegados y pidieron mayores competencias. El proceso de mayor regionalización alcanzó un hito relevante con la elección de los gobernadores y su instalación.
La semana pasada se realizó en San Pedro de La Paz, en la Región del Biobío, el Primer Encuentro de Gobernadores Regionales del país, que convocó a la totalidad de las autoridades elegidas por primera vez en las urnas y que ya llevan dos meses de ejercicio en un proceso que ha arrojado luces y sombras a lo largo del territorio nacional, en particular por la existencia de los delegados presidenciales y el hasta ahora cuestionado proceso de transferencia de competencias. Ambos puntos fueron precisamente foco central de la crítica de las nuevas autoridades, que en la denominada "Declaración de Concepción" propusieron que el delegado se transforme en un secretario regional ministerial más y que se acaben "los experimentos unilaterales de transferencias de competencias inconsultas a los gobiernos regionales".
El financiamiento para el desarrollo regional -el ámbito de la descentralización fiscal- es el que sin duda genera mayores conflictos y constituye siempre "la madre de todas las batallas" en estas materias. Esto incluye tanto al enfoque vinculado a los gastos, es decir, el dotar a los niveles subnacionales de mayores niveles de decisión en torno al destino de la inversión pública, como el enfoque de ingresos, es decir, avanzar a contar con mayores recursos propios levantados regionalmente. En ese contexto, la propuesta firmada por los gobernadores es ambiciosa y, sin duda, ameritará una ardua discusión, especialmente en el plano legislativo.
Lo que se propone es, en el primer caso, que la inversión de decisión regional llegue a lo menos a un 40% de la inversión nacional y su evaluación sea pertinente a la realidad de cada territorio. Y en el segundo, contar con rentas regionales y coparticipación tributaria. Es innegable que avanzar en estas materias será complejo, pero la presencia en el encuentro de los candidatos con mayores posibilidades de quedarse con la próxima Presidencia de Chile da cuenta de un compromiso transversal con las regiones, que podría servir de palanca para continuar con una senda que, aunque gradual y muy lenta, a juicio de muchos, muestra al menos una creciente relevancia en la agenda política nacional.