Han sido largos meses de entrenamientos en casa, perseverancia e incertidumbre para Deportes Quillón, elenco que tras un año y medio de inactividad volverá a competir de manera oficial en el certamen de Tercera B, la quinta categoría del fútbol chileno. Ello se concretará este sábado, cuando los del Valle del Sol visiten a Chimbarongo desde las 15:30 horas por la primera fecha del grupo 5.
Tal como se informó anteriormente, el conjunto quillonino compartirá zona con Deportes Tomé, San Pedro de la Paz y el propio cuadro del mimbre, en una temporada más singular de lo común, con menos equipos, pero más grupos definidos por zona geográfica a causa de la pandemia. Será un torneo corto, con 24 clubes competidores, que concluirá el 19 de diciembre.
A escasos días del debut, las expectativas por ascender crecen y crecen. Pablo Soto, gerente deportivo del club, cuenta cómo han sido estas jornadas previas al gran compromiso del sábado. Obviamente, la ansiedad por saltar a la cancha es un factor para tener en cuenta.
"El equipo está bien, los chicos han entrenado de gran manera. Hay un cierto grado de ansiedad. Los muchachos quieren que llegue luego el sábado para ganar el primer objetivo. Todos están con muchas ganas. Incluso, tendríamos plantel casi completo, llegaríamos prácticamente sin bajas, a excepción de José Castro, quien padece de un desgarro", cuenta el encargado.
Y es que, si bien tienen una importante confianza, está claro que los duelos duran 90 minutos. "Se ha entrenado bien y el grupo está bueno, pero uno sabe que los partidos hay que jugarlos. Los muchachos no se ponen la ficha de favoritos para nada, porque saben que hay equipos buenos y otros que se reforzaron súper bien, sobre todo acá en el sur, que históricamente ha sido una zona fuerte", añade Soto.
Confianza a tope
A propósito de lo anterior, en Quillón no han escatimado en refuerzos. En la actual plantilla destacan varios jugadores con pasos en el fútbol profesional, como, por ejemplo, Marcelo León, exPalestino; Camilo Becerra, exPuerto Montt; Aron Araya, exLinares y Oskar Méndez, quien se formó en Ñublense y luego estuvo en Fernández Vial, entre otros.
Precisamente, este último ya palpita este anhelado estreno en la competencia. Y es que en su caso personal será incluso más anecdótico, puesto que en todo este período pandémico pensó hasta en dejar la actividad para siempre. Pero este año va por su revancha, sumado a que ya registra un paso anterior en el cuadro del Valle del Sol.
"Después de estar en Vial volví lesionado a Ñublense, pero no pude entrenar, esto en 2019. Ahí quedé sin ningún equipo y me llamaron desde Quillón. Tras ello estuve en la Corporación Lota, momento en el que empezó el Covid-19 y por ende no pude jugar. Posteriormente, volví a Chillán y me puse a trabajar, me fui a vivir con mi polola. Es difícil volver al fútbol cuando uno tiene otras cosas", reflexiona Méndez.
Superado lo anterior, el volante surgido en Paso Alejo expresa lo que significa volver a la actividad de manera formal luego de 18 meses. "Es bonito después de tanto tiempo sin jugar. Con los compañeros extrañábamos entrenar. Yo estuve parado dos años y volver después de eso, es lindo. Esperamos el sábado demostrar que este equipo está para ascender. Creo que nos estamos preparando para subir. Llevamos varios días de prácticas y la sensación que queda es que se puede lograr el objetivo", apunta el volante de 24 años.
Finalmente, entrega su predicción para este arranque de campeonato. "Creo que el equipo más fuerte del grupo es Chimbarongo. Me parece que tendremos que dar de inmediato el primer combo. Aquí todos meten como locos, será complicado", cierra.
6 partidos
1 deberá disputar Deportes Quillón en la fase grupal del campeonato de Tercera División "B".