102 partos de madres extranjeras ha atendido en 2021 el Herminda Martín
INCLUSIÓN. Desde el 2018 el Hospital de Chillán cuenta con la figura de facilitadora cultural, la cual apoya al migrante.
María Alejandra Jiménez, de 33 años, es una gestante de 30 semanas de embarazo, y madre de una niña de 2 años y medio, la que dio a luz en el Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico Herminda Martín de Chillán. En cuanto a su experiencia compartió "desde el momento que ingresas al hospital tienes compañía, asistencia, mi hija nació antes de la pandemia y claro aquí hay que parir, literalmente, no es como en Venezuela que te hacen cesárea si tienes las condiciones para pagarla o si el trabajo de parto se prolonga, aquí la cesárea es cuando ya no hay más opciones y está en riesgo la vida del bebé o de la madre".
La venezolana recordó que "cuando llegué a Chile estaba embarazada, enseguida ingresé al Cesfam, y el embarazo estuvo siempre monitoreado, todo el personal te cuida, te atiende, está pendiente de todo, hasta un kit de nacimiento te entregan en el hospital para el bebé".
Atención con inclusión
Desde enero a noviembre de 2021, según reportó el Hospital Clínico Herminda Martín de Chillán, se han atendido 1.806 partos en el Servicio de Obstetricia y Ginecología. "De éstos, 102 han sido de mujeres migrantes, siendo un 37,7% de origen venezolano y un 30,9% de ascendencia haitiana. El resto es representado por otras nacionalidades", se indicó. Es decir que el 5,64% de los nacimientos en el Hospital de Chillán están registrados con madres migrantes.
En cuanto al trabajo intercultural que se viene realizando desde abril de 2018 a la fecha, puertas adentro del centro asistencial de referencia de la región, Lidia Monroy, de formación profesional matrona y que cumple con el cargo de facilitadora intercultural, amplió los alcances del programa.
"Si bien desde el 2018, existe la figura del facilitador intercultural, éste se limitaba más a ser un facilitador lingüístico, se limitaba a hacer traducciones para minimizar la barrera idiomática, pero cuando me incorporo en junio de este año el campo de acción se amplía un poquito de cierta manera y se asume este cargo de facilitadora intercultural que no tiene solo la visión de traducir, sino de llevar a cabo el respeto intercultural, no sólo del idioma", compartió la profesional de la salud que forma parte del Departamento de Gestión de Usuarios y Participación Social del HCHM.
Ella comentó que "en este contexto lo que hacemos en la práctica, específicamente para las madres de nacionalidad haitiana, lo más potente, lo que más se realizan son las traducciones (...) también hemos realizado unas capacitaciones para los funcionarios en interculturalidad", preciso.
Monroy añadió que el objetivo de esto "es que como funcionarios vayamos aprendiendo sobre el respeto a la cultura del otro, porque si bien tenemos una brecha importante que es un idioma distinto, existe otra brecha que es una cultural, donde somos muy diferentes y las madres y las mujeres haitianas tienen una atención en el parto en Haití que es muy distinta la atención del parto que se tiene en Chile", dijo, comparación que realizó debido a su trabajo en Haití durante el 2008 y 2012.
37,7% de las madres