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Movilidad sustentable
La movilidad sustentable es un concepto que ha ganado fuerza y mejor aún se ha convertido en un estilo de vida para miles de personas. Andar en bicicleta, por ejemplo, ha sido uno de los grandes cambios que hemos visto en las urbes. Un estudio de Movilidad y Transporte realizado en la Región Metropolitana por Studio Público dio a conocer que para trasladarse con mayores medidas de precaución sanitaria, las personas decidieron optar por algo mucho más ecológico y bueno para la salud: la bicicleta.
El estudio también expuso un aumento de 4% en personas que migraron hacia la bicicleta, en comparación con el año anterior, alcanzando un 12,6%. Cifras positivas, pero no necesariamente suficientes. Y ese es el desafío que debemos enfrentar el 2022, que estos números aumenten y por sobre todo persuadir los beneficios a corto y largo plazo que tiene andar en bicicleta. Que sí se puede convertir en un medio de transporte oficial para muchos, que es más económico que otros medios y que además es bueno para la salud.
No basta con escribirlo sino que debemos aplicarlo. Llegó el momento de ocuparse del tema. Una persona que pedalea cambia su vida y si muchas lo hacen pueden cambiar una sociedad completa, impactando en la ciudad que buscamos construir para nosotros y las futuras generaciones.
Alex Ferreira, Tembici Chile
Tomar palco
El gaffe (metedura de pata) que le ocurrió a la presidenta del Senado cuando se escuchó un audio de su conversación con otro honorable en plena sesión, amerita una aclaración para las nuevas generaciones respecto al concepto de palco, tan vigente en el siglo pasado. "Cómo va sufrir el próximo gobierno y yo...voy a tomar palco", fue su comentario, que terminó con una risita que me hizo recordar a Cruella de Vil. En concreto, el palco no es un bebestible para tomar sino que es un compartimento con varios asientos donde se contempla un espectáculo.
Tomás Varela H.
Helados saludables
Con las altas temperaturas muchas veces la población busca algún alimento que sea fresco para hacer frente al calor. Dentro de todas las opciones que se ofrecen, sin duda los helados están entre los preferidos por grandes y chicos. Son muy solicitados en esta época por su baja temperatura, por su sabor y textura agradable al paladar. A la hora de escoger alguno, aquellas opciones en base a fruta y agua van a ser las mejores desde un punto de vista nutricional, considerando que el aporte calórico, graso y de azúcar será más bajo en comparación con un helado de crema, en especial con aquellos que se venden en el comercio.
En ese contexto, surge la opción de prepararlos en casa. Sobre todo si hay niños en la familia, pueden ser una buena alternativa para que los más pequeños del hogar participen.
Para prepararlos, necesitamos: hielo, una base líquida que puede ser agua, leche o bebida vegetal, una parte sólida que se recomienda que sea una fruta, idealmente las de la estación, pues son ricas en antioxidantes. Algunas opciones son frutillas, melón o durazno. Endulzar es opcional. Tomamos nuestros ingredientes, los mezclamos en la licuadora y porcionamos en moldes para helado. Luego congelamos por tres horas aproximadamente y listo para disfrutar.
Un buen consejo es agregar yogur griego para proporcionarle mayor cremosidad a la preparación.
Elizabeth Sánchez Novoa, Académica de Nutrición y Dietética, Universidad San Sebastián
Porfiados
Hace poco, un profano testarudo me decía: "a porfiado; porfiado y medio". Y para respaldar el dicho, hay otro, casi lapidario, pero de buena tinta: "Quien adoctrina al porfiado, pierde el tiempo de su agrado". Todo esto, porque frente al incontenible avance del coronavirus o sus variantes, muchas personas siguen la vida como si nada pasara.
Vemos en la TV, las emisoras y los diarios, que las playas, eventos deportivos y de fin de año, grupos juveniles, las calles, todo repleto. Muchas y muchos sin la bendita mascarilla. Si caminamos por nuestra ciudad, pareciera todo normal. Mucha gente descuidada con la mascarilla o con ella en el mentón, en la frente o como adorno. No se respetan las distancias, los protocolos, los aforos y mucho relajo.
En algunos vehículos de la locomoción colectiva, se cree que los contagios ya no existen: se acabó el alcohol gel y las medidas sanitarias e higiénicas. Debemos cuidarnos, porque ya se avisora un invitado de piedra, un bicho elegante, que lleva el nombre de la décima quinta letra del alfabeto griego: el temible Ómicrom, que ha dejado de manifiesto su alta eficiencia infectante y es el culpable del 30% de los nuevos contagiados.
Luis Omar Sepúlveda