Vacaciones en tiempos de covid-19
Cada día que pasa, se repite la noticia del alza histórica en el número de casos de Covid-19 a nivel nacional, influida por la llegada y transmisión comunitaria de la variante Ómicron, conocida por su alta contagiosidad. A partir de ello, muchas voces han alertado respecto de lo que se espera para las semanas que quedan de enero y febrero, en las que se proyectan las cifras más altas de contagios que se han registrado en el país.
El contexto en que se está dando esta situación coincide con la época de verano y vacacional. Por lo anterior, se torna muy relevante reiterar el llamado al auto cuidado y seguir las instrucciones que se entregan desde la autoridad sanitaria, para evitar que el descanso se transforme en que usted o alguien de su familia aumenten las cifras de casos nuevos de Covid-19.
Debe seguir reforzándose la importancia de la prevención, por lo que, si usted tiene planificado salir, debe preferir el desarrollo de actividades en lugares abiertos, tales como playas y parques, evitando sitios en que se generen aglomeraciones de personas y espacios cerrados. Respete en todo momento los protocolos del lugar al que acude, manteniendo uso de mascarilla y distancia física, y lleve siempre mascarilla de recambio que preferentemente sea de tipo quirúrgica o tres pliegues, alcohol gel y, por supuesto, utilice diariamente bloqueador solar y llévelo consigo procurando aplicación tres veces al día ya que es también muy importante prevenir el cáncer de piel.
Finalmente, preste atención a su estado de salud y de quienes le acompañan, detectando síntomas tempranamente y consultando ante sospecha de Covid-19 para realización de examen de confirmación o descarte. Recuerde que es su deber cuidarse y su responsabilidad cuidar también a su entorno, pues, para superar la pandemia debemos colaborar todos y todas.
Daniela Barriga Bustos Académica de Vinculación con el Medio, Universidad San Sebastián
Pensión Universal
La pensión garantizada universal (PGU), es un éxito transversal, desde el Gobierno hasta el Legislativo, donde se pone fin a casi tres periodos presidenciales sin avances en temas de previsión. Tiene doble mérito: prioriza a nuestros adultos mayores, y a los adultos mayores de clase media.
Por otro lado, se pone fin al desincentivo a la cotización, pues el antiguo pilar solidario entregaba un mayor aporte a quien menor ahorro previsional tuviera, pasando ahora a ser un pensión garantizada universal sin distinción, la cual es complementada con la pensión contributiva a partir de los ahorros previsionales de cada trabajador.
Es un justo beneficio a quienes de una u otra forma construyeron este país, el cual hoy puede retribuir una pensión de $185.000 a sus adultos mayores.
Eduardo Jerez Sanhueza
La oportunidad del litio
En Chile la historia del salitre es largamente conocida: el auge de su producción y su posterior caída, con el desarrollo del salitre sintético y las crisis económicas mundiales. Ahora se vuelve a hablar de un nuevo oro blanco: el litio. Pero para no repetir los errores cometidos con el salitre, partamos señalando que el litio está rodeado de mitos que debemos desmentir.
Primero, el mercado no es de gran tamaño, las exportaciones de productos de litio son un 4% de los envíos del cobre.
El segundo mito es que es una sustancia estratégica: Chile tiene sólo el 10% de las reservas de litio del mundo, y el futuro del litio está destinado a la electromovilidad y energías limpias, no a usos militares como fue en el pasado.
El tercer mito es que debería ser el Estado, a través de la empresa nacional, quien realice su explotación. Una idea que choca con dos realidades: por un lado, hay avances en sustitutos del litio, como las baterías a base de sodio, que impiden perder tiempo; por el otro, el Estado Chileno enfrentará desafíos políticos y sociales de gran envergadura. ¿Éste podrá hacerse cargo de los gastos que la puesta en marcha de un proyecto de litio? ¿Expropiarán concesiones mineras? ¿El ciclo político permitirá dirigir recursos a esta aventura antes que a otros fines más inmediatos?
Por lo anterior, la idea de que los privados exploten litio a través de un CEOL se justifica plenamente para aumentar la producción y capturar gran parte de su valor, pasando al privado el riesgo de explorar y encontrar reservas suficientes para desarrollar un proyecto.
El gobierno entrante aún está a tiempo de permitirle a Chile ser un actor principal en la revolución de energía y electromovilidad, y que el litio no sea -como lo fue antes el salitre- una oportunidad perdida.
Alejandro Montt