Comentando la noticia que da cuenta de 21 establecimientos siniestrados a nivel país, el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, llegó ayer a Ñuble. Eso sí, la buena nueva es que la región sólo cuenta con una escuela consumida por las llamas, pero como dicha construcción estaba sin uso desde hace diez años, las cifras nos mantienen invictos sin establecimientos educacionales quemados.
"En Biobío son 14 establecimientos siniestrados y 7 corresponden a Araucanía. La medida más importante entonces es la reubicación de los estudiantes, pues el 1 de marzo parte el año escolar 2023 y nuestro compromiso como gobierno es que ningún niño o niña se quede fuera del sistema educacional", explicó la autoridad ministerial.
El secretario de Estado garantizó que, mediante los fondos de apoyo a la educación pública, se dispondrá de transporte escolar si hubiese que realizar reubicación de estudiantes a varios kilómetros de distancia, lo que ya es un hecho en otras regiones afectadas por la catástrofe.
"Además, tenemos garantizado el servicio de alimentación a través de Junaeb, donde en cada comuna hemos ido dialogando con alcaldes y alcaldesas para implementar este servicio. Por ende, queremos dar tranquilidad a las familias chilenas de que con toda seguridad vamos a partir el año escolar como corresponde", señaló, añadiendo que existe actualmente la infraestructura necesaria para recibir a los estudiantes sin problema alguno.
Creando conciencia
El ministro Marco Antonio Ávila comentó además que se va a comenzar a implementar en el plan educacional especial consistente en material destinado a crear conciencia ambiental en los niños y también sobre como actuar en casos de emergencia que afectan al país y que van mucho más allá de los incendios forestales.
"Ese material estará enfocado principalmente a la contención socioemocional de las y los estudiantes y estará disponible desde la próxima semana para que la preparación sea efectiva. Queremos que la primera semana de clases sea de encuentro comunitario y procesamiento de esta situación", aseveró.
Asimismo, se dio a conocer un acuerdo estratégico entre los ministerios de Agricultura y Educación, el cual tendrá como objetivo conformar las llamadas "brigadas juveniles verdes".
"Muchos jóvenes nos mandan cartas preguntándonos como pueden ayudar a combatir los incendios forestales. Por ello, hemos acordado con el ministro Marco Antonio Ávila crear las brigadas juveniles verdes de protección ambiental", expuso al respecto el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela.
El secretario de Estado argumentó que tras conversar con varios alcaldes rurales del país, han coincidido en la necesidad de educar en la prevención de siniestros forestales, pero también urge corresponsabilidad.
"Aquí todos tenemos que tener callos en las manos. No basta con criticar al que bota basura, sino que también debemos ayudar a recogerla. Hay que ayudar a cortar pasto y mantener cortafuegos habilitados, eso es parte de la tarea. Aquí necesitamos el apoyo de todos los profesores también, pues Ñuble no ha tenido escuelas siniestradas", informó la autoridad que también hace de enlace con el nivel central.
"En materia de prevención, todos tenemos que tener callos en las manos por estar ayudando"
Esteban Valenzuela, Ministro de Agricultura
"Queremos dar tranquilidad a las familias chilenas de que vamos a partir el año escolar el 1 de marzo".
Marco Antonio Ávila, Ministro de Educación