Ya se encuentra disponible en Amazon Prime "Sayen", la primera película nacional hecha especialmente para la plataforma. Dirigida por el chileno estadounidense Alexander Witt, cuenta la historia de una mujer mapuche (Rallen Montenegro), quien descubre una peligrosa conspiración liderada por una corporación que está destruyendo las tierras de su familia así como los ecosistemas locales en toda América Latina. Es así como Sayen tendrá la tarea de llevar el caso ante la justicia y salvar el legado de su familia.
Producida por Fábula, la productora fundada por los hermanos Juan de Dios y Pablo Larraín, la cinta es la primera de una trilogía de acción, y fue coescrita por Patricio Lynch y Carla Stagno. En su elenco, además, cuenta con tres actores españoles: Arón Piper, Enrique Arce y Roberto García Ruiz.
Un tema práctico
Filmada en plena Araucanía, el relato comienza con Sayen retornando a su hogar familiar en medio de los bosques del sur del país. Allí se reencuentra con su abuela Ilwen Lemunko (Teresa Ramos), machi e importante figura de su pueblo, y amigos de la infancia como José (Camilo Arancibia), quien es periodista.
Pero la tranquilidad se termina cuando aparecen los representantes de una multinacional, encabezados por el joven español Antonio (Piper de "Elite"), para hacerle una oferta a Ilwen. Ésta consiste en varios millones por sus terrenos, ya que quieren sumarlos a un proyecto de preservación ecológica, pero sus verdaderas intenciones son muy diferentes.
Esto porque la empresa que dirige Máximo Torres (Arce, "La Casa de Papel), padre de Antonio, está realmente interesada en explotar el cobalto que ocultan las tierras de Sayen y su familia.
Arce hace un punto sobre la historia: "Ahora mismo los españoles no tienen que ver con nada de lo que está pasando ahora allí. No son los dueños de las corporaciones, ni tienen porcentajes en ellas, ni tienen nada que ver en la lucha actual de las poblaciones indígenas. Son empresas norteamericanas las que están expoliando esos terrenos". Sin embargo, el que fuesen españoles se debió a "una cuestión práctica", para que toda la película fuera rodada en un solo idioma, dijo a Europa Press.
"Que el mundo occidental explote y se aproveche de los países menos desarrollados, del hemisferio sur, es algo que pasa, es universal", secunda Piper que coincide también con Arce en que esta no es una historia de buenos y malos, sino que el conflicto que subyace en la trama es el enfrentamiento cultural que ha existido históricamente en la región, una realidad mucho más compleja.
Por otra parte, se trató de un rodaje en exteriores que fue todo un reto en el que, destaca el joven actor, contó con el apoyo fundamental de Witt. "Tenía una la visión muy clara. Sabía que plano rodar, dónde y cómo e incluso cogía el la cámara. Me sentía muy en brazos. Tiene muy buena dinámica y es muy profesional... se nota que viene del cine americano", dice Piper. "Rodar en altura en la Araucanía fue duro", acotó por su parte, Roberto García Ruiz, actor de "La Casa de Papel".