Las negociaciones para una tregua en la Franja de Gaza entre Israel y Hamás continúan en Doha pese a las "dificultades" y con la presencia de los equipos negociadores de todas las partes, afirmó el vocero del ministerio de Relaciones Exteriores catarí, Majed al Ansari.
"Lo que puedo decir es que la negociación sigue en marcha. Y continuamos desde el principio de estas negociaciones con esperanza. Pero, por supuesto, hay muchas dificultades", dijo Al Ansari en su rueda de prensa en Doha.
Asimismo, indicó que "las reuniones siguen en Doha, no hay ningún desarrollo que permita pensar que alguna de las partes se han ido de las mismas".
"Sin considerar idas y venidas de equipos, las reuniones siguen. Y puedo confirmar que parte de los equipos negociadores siguen aquí", dijo Al Ansari tras el anuncio realizado por el gobierno de Benjamin Netanyahu de llamar de regreso a Israel a su equipo negociador en la capital catarí.
Al Ansari se refirió también a la resolución aprobada el pasado lunes por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que pide un alto al fuego en Gaza, la primera vez que se emite una resolución en este sentido desde el inicio del conflicto hace casi seis meses, que consideró como "una herramienta de presión" que su país espera "tenga un impacto positivo" en las negociaciones.
Esa resolución, posible por la abstención de los EE.UU en la votación, fue duramente criticada por Israel y llevó a Netanyahu a cancelar el viaje de dos de sus principales asesores a Washington, donde iban a discutir el planeado asalto israelí sobre Rafah.
"De momento, no encuentro ningún impacto negativo de esta resolución en las negociaciones.(...) Estas siguen en marcha, no es necesario entrar en detalles. Tenemos algunas ideas renovadas y eso es una práctica normal en las negociaciones. Hemos trasladado visiones, pensamientos e ideas de ambos lados, la operación continúa de forma fluida", insistió Al Ansari.
"delirantes"
Precisamente, Israel tildó este martes de "delirantes" las demandas del grupo islamista Hamás, que exige un alto el fuego "integral" y la retirada de las tropas israelíes del enclave palestino para sellar un acuerdo de tregua en la Franja de Gaza y de canje de rehenes por presos palestinos, y advirtió que "no se someterá a sus exigencias".
Es en ese marco en el que Netanyahu llamó a su equipo negociador de regreso a Israel.
El grupo islamista informó el lunes a los mediadores -Qatar, Egipto y EEUU- que mantenía esas condiciones para un alto al fuego, como viene haciendo prácticamente desde el inicio de las negociaciones.
Israel puso el lunes sobre la mesa un borrador de acuerdo, diseñado junto con EE.UU., y estaba a la espera de una respuesta de Hamás, que fue negativa.
Petro, "una vergüenza"
Mientras, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia pidió cumplir la resolución del Consejo de Seguridad aprobada la víspera con abstención de EE.UU.
"Rusia está convencida que es necesario aprovechar la oportunidad de cumplir la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, cuya aprobación EEUU obstaculizó con tanta insistencia e hipocresía", señaló la diplomacia rusa, que añadió que de esta manera se "fija de un modo claro y unívoco la exigencia del cese al fuego inmediato durante el mes de Ramadán, a cumplir por todas las partes y que conducirá a un fin duradero de los enfrentamientos".
Moscú subrayó que esta resolución también prevé la posibilidad de llevar ayuda humanitaria al enclave palestino y la liberación de los rehenes retenidos por las milicias de Hamás.
Finalmente, el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Israel Katz, acusó al presidente colombiano, Gustavo Petro, de apoyar a "los asesinos de Hamás que cometieron masacres y horribles crímenes sexuales contra bebés, mujeres y ancianos", calificándolo como "una vergüenza para el pueblo colombiano". Esto ocurrió después de que Petro amenazara con romper relaciones diplomáticas si Israel si no cumple con la resolución de la ONU.