Educación financiera y previsional
En un seminario de hace ya unas semanas, Criteria nos presentó características de la informalidad laboral en Chile desde perspectivas que uno suele no detenerse a reflexionar. Uno de los mensajes que me quedó grabado fue que las personas no ven indignidad en el trabajo informal. Tiene sentido y no es recriminable, pues para la mayoría la importancia está en la palabra "trabajo", no en el apellido. Es una realidad país que muchas veces escapa de las manos de los ciudadanos y es ahí donde se requieren políticas públicas, o empujoncitos, que impulsen sobre todo la cotización a la seguridad social.
Pero lo que también urge es educación financiera y previsional. Es una emergencia poco atendida y distinta a la laboral: según los datos del INE recién salidos del horno, sólo el 64% de los ocupados está cotizando y el 9% no está haciéndolo. ¿Dónde queda el 27% restante? Al 23,8% "no le corresponde respuesta", y 3,2% ni siquiera sabe o no responde. Lamentablemente, es poco realista pretender que está pregunta se responda más precisamente en el mediano plazo.
En el entretanto, para dar empujoncitos de manera efectiva se debe partir por construir indicadores más robustos y precisos, ojalá de datos administrativos y no de un autorreporte en un país con tal falta de educación financiera y previsional.
Matías Vargas Vera, investigador Observatorio Perspectivas
La revolución tecnocreativa
Los Juegos Paralímpicos París 2024 ya empezaron y esperamos que sean tan innovadores como impactantes para el público.
Los JJ.OO. 2024 cerraron con la tecnocreatividad como protagonista. Todos quedamos impresionados por el uso de cámaras de 360º, transmisiones en vivo en 8K y opciones de visualización interactiva, incluyendo un metaverso de contenidos.
Así, la tecnocreatividad actúa como una llave que nos permite hacer sinergias tanto en el ámbito deportivo, como en el de la salud, educación, agricultura, minería y muchos otros más. Algo que deberíamos mirar con atención desde Chile.
Isidora Cabezón Papic
Pasar agosto
En nuestro país se utiliza el popular dicho "pasar agosto" cuando una persona le "gana" al invierno. Podemos decir que los primeros días de septiembre, en alguna medida, son de celebración para muchos. Sin embargo, combatir los virus respiratorios, enfermedades y el cuidado de la salud debe ser durante todo el año.
Cada día estamos expuestos a un gran número de posibles patógenos que se encuentran a nuestro alrededor en forma de bacterias, virus, hongos y otros microorganismos. Nuestro sistema inmunitario es una compleja red de células, tejidos y órganos que protegen al cuerpo de los posibles microorganismos nocivos que pueden causar infecciones.
Por eso la prevención es clave y contar con un sistema inmune robusto ayuda a evitar enfermedades. ¿Cómo lograr esto? Hay diversas alternativas complementarias a las vacunas. Ingerir a diario vitaminas C, D y Zinc es una solución a la mano.
Sin embargo, lo preocupante es que la última Encuesta Nacional de Salud arrojó que el 84% de la población en nuestro país presenta déficit de vitamina D. Adicionalmente, según el Instituto de Salud Pública, el verano 2024 en Chile fue el de mayor circulación viral desde hace 13 años. Las enfermedades que predominaron fueron el Covid-19, Rinovirus, Adenovirus, Influenza A y Parainfluenza. Para esto la vitamina C y el Zinc reducen la duración y los síntomas de enfermedades respiratorias y regulan el sistema inmune. A lo que se suma que el Zinc posee propiedades antinflamatorias y contra el estrés oxidativo.
Consumir suplementos vitamínicos durante todo el año no previene el contagio de virus, pero sí ayuda a disminuir la duración e intensidad de los cuadros, ya sean graves, crónicos o recurrentes. Pasar agosto depende en gran parte del autocuidado. Pasemos también septiembre, octubre y los meses siguientes.
Doctora Carolina Herrera