Estrategia centrada en la inteligencia para mejorar el servicio a la ciudadanía
Carabineros en Ñuble está siguiendo las directrices de la institución a nivel nacional, esto es potenciar un trabajo cotidiano, eficaz y eficiente para los habitantes, con la mirada directa a recuperar los espacios públicos y motivar el bienestar social a través de la seguridad.
Carabineros de Chile está en pleno fortalecimiento de sus operaciones policiales para brindar un mejor servicio a la comunidad y entregar respuestas oportunas a las demandas de los vecinos.
Este foco en la efectividad del servicio es un mandato del general director, Marcelo Araya Zapata, y está expuesto en el plan de "Policiamiento Estratégico Inteligente" que busca potenciar un trabajo cotidiano eficaz y eficiente para los habitantes de todo el territorio nacional, abrazando las diferencias geográficas y sociales, con la mirada directa a recuperar los espacios públicos y motivar el bienestar social a través de la seguridad.
Y es que la sensación de inseguridad es una de las prioridades de la institución a nivel nacional, trabajo que se está ejecutando con el mayor compromiso con los lineamientos de la máxima autoridad policial, para que los equipos generen actuaciones bajo un ritmo de acción policial constante y ascendente, con el objetivo de satisfacer las demandas ciudadanas.
Al centro de esta estrategia, está la inteligencia, la que permite focalizar la presencia en los barrios, abordando las particularidades de cada uno de ellos. Esta inteligencia considera la utilización de la información obtenida desde la comunidad, para ser analizada y ponderada, para evaluar y gestionar acciones policiales efectivas en el ámbito de las competencias de Carabineros, tendientes a, por un lado, "no perder la calle", y por otro lado, "recuperar la calle".
Para lograr este grado de máxima eficacia y eficiencia, y no "perder la calle", Carabineros en la Región de Ñuble está reforzando la presencia en el territorio, con mayor comunicación y trabajo conjunto con la comunidad, con mandos operativos en terreno y sumergidos en las problemáticas locales, para abordarlas con acciones colaborativas y permanentes.
También, incrementando los controles y fiscalizaciones integrales en todas las comunas de la Región, ejerciendo acciones individuales por parte de las unidades territoriales, y también conjuntas con las unidades especializadas, con el objetivo de verificar el cumplimiento de todas las materias que se rigen por ley.
Por otra parte, para "recuperar la calle", los equipos están potenciando las investigaciones para indagar y establecer las dinámicas criminales de la zona. Esto, con la vital coordinación con el Ministerio Público y otras entidades como la Policía de Investigaciones, para abordar los fenómenos delictuales de mejor manera y crear las estrategias adecuadas, que permitan intervenir los sectores críticos, con acciones articuladas, efectivas y concretas, y disminuir la sensación de inseguridad.
Esta visión integral e inteligente del trabajo, está avalada por los positivos resultados obtenidos durante el último año en el territorio, y que han sido posibles sólo por el incansable y comprometido trabajo profesional. Destaca en el último periodo la detención de más de 8.900 personas por su responsabilidad en diversos delitos y mantener órdenes de aprehensión vigentes.
En los despliegues permanentes e intervenciones focalizadas, Carabineros realizó el último año más de 398 mil controles y fiscalizaciones, a partir de las cuales cursaron 26.100 infracciones al tránsito y 2.900 infracciones a la ley de alcoholes.
Además, los equipos policiales sacaron de circulación un total de 126 armas de fuego, 58 de las cuales fueron incautadas en procedimientos y otras 126 obtenidas en la modalidad de entrega voluntaria. Decomisaron más de 630 kilos de drogas, como marihuana, pasta base y cocaína, y recuperaron 208 vehículos producto de robo.