Mes del Mar
"Y ese mar que tranquilo te baña te promete el futuro esplendor".
Las promesas para que se realicen deben ser cumplidas y activadas por acciones humanas, porque ese mar no nos dará ese futuro esplendor en forma espontánea y regalada. Chile tiene más territorio marítimo que terrestre, convirtiéndolo en uno de los países con mayor jurisdicción marítima y zona económica exclusiva.
Si bien es cierto Chile tiene actividades marítimas, ante la inmensidad del territorio parecieran solo atisbos. Hemos sido capaces de desarrollar la industria del salmón y el mejillón en cantidades apreciables, pero aún nos esperan miles de kilómetros de aguas protegidas en los canales del sur para dedicarlos a la acuicultura y explorar las posibilidades de utilizar la energía de las corrientes de masivas cantidades de agua y mucho más.
Afortunadamente tenemos a la gloriosa Armada de Chile que constantemente nos hace mirar al mar y su futuro esplendor.
Marcos Concha Valencia
Día Mundial de la Libertad de Prensa
En el Día Mundial de la Libertad de Prensa, es justo reconocer a quienes, desde distintos espacios, sostienen el oficio de informar con rigor y coraje. Hoy más que nunca, el periodismo encuentra en las nuevas plataformas no sólo un canal, sino una herramienta para acceder a realidades, voces y fuentes que antes estaban fuera del radar.
La libertad de prensa no es sólo el derecho a publicar, sino también la posibilidad de buscar e investigar en múltiples capas del mundo que habitamos. En tiempos donde los relatos se fragmentan y las verdades se disputan, el rol de los periodistas que saben moverse entre medios tradicionales y nuevas tecnologías es más vital que nunca.
Defender esa libertad es también defender su evolución.
Verónica Poblete Reyes
Notas infladas, sueños desinflados
Durante años, en Chile se ha sostenido la idea de que el esfuerzo escolar es recompensado con el acceso a la educación superior. Sin embargo, esa promesa ha comenzado a resquebrajarse, especialmente para miles de estudiantes que han visto cómo la inflación de notas -lejos de nivelar el campo- ha profundizado la desigualdad.
El Ranking de Notas, creado para reconocer el mérito en contextos vulnerables, ha sido manipulado por algunos establecimientos que, con plena autonomía, han ajustado sus criterios evaluativos para mejorar las posibilidades de sus estudiantes. Según datos del Mineduc, entre 2011 y 2023 el porcentaje de egresados con promedio sobre 6,0 creció del 20% al 41%, mientras que en colegios particulares pagados el promedio subió de 6,11 a 6,29. ¿Se trata de una mejora real en los aprendizajes o de un maquillaje institucionalizado?
Este fenómeno ha puesto en jaque la credibilidad del sistema y ha perjudicado especialmente a quienes estudian en liceos públicos o subvencionados, donde inflar notas no es una opción ni una prioridad. Así, el acceso a la universidad se ha transformado en una competencia desigual, donde no todos parten desde la misma línea.
Ante esta realidad, el Comité Técnico de Acceso ha anunciado una reforma al sistema de ranking desde 2028, que evaluará al estudiante en función de su posición relativa dentro del colegio. Aunque es un paso importante, no basta con corregir la fórmula: es necesario repensar el concepto mismo de evaluación, mérito y justicia educativa.
La educación no puede seguir reproduciendo lógicas basadas en la apariencia del rendimiento. Es urgente transitar hacia un modelo que valore el aprendizaje genuino, el esfuerzo honesto y el compromiso con el conocimiento. Solo así podremos construir un sistema que no solo abra las puertas de la universidad, sino que lo haga con criterios justos y sostenibles.
Porque cada nota inflada no solo distorsiona un promedio: también posterga los sueños de quienes han luchado contra la adversidad con honestidad y mérito real.
Alejandra Ríos Urzúa
Directora Observatorio
para la Inclusión UNAB