Navidad del Buen Vivir
Señor Director: Quienes en nuestro concepto político y de vida propiciamos el "Buen Vivir", que sencillamente significa vivir bien entre nosotros , vivir bien contigo y conmigo, y no conformarnos de que vivamos bien unos pocos mientras los demás viven mal, significa vivir en armonía con los que nos rodea, con nuestra naturaleza, con el entorno, recuperando la cosmovisión de nuestros pueblos originarios, que todo respetaban, porque consideraban que todo ello estaba en su equilibrio justo y en armonía. El extracto de este concepto, creo que debiera ser el espíritu implantado por la cultura occidental y cristiana en nuestras latitudes para la Navidad consumista que vivimos hoy, donde inmersos en un sistema neoliberal y capitalista, depredador de los recursos naturales y humanos, ajeno a la solidaridad colectiva, propugna el "bienestar" individual y mezquino de unos pocos a costa de los muchos.
Las fuerzas políticas de quienes gobiernan y ejercen el poder en estos modelos, como es nuestro caso, nos imponen como línea de pensamiento que este es el único modelo posible de vivir, un modelo perverso sostenido por la voracidad inagotable de la especulación financiera, que se colude en precios especulativos y malas prácticas comerciales, con la libertad cómplice de una sociedad chilena embobada en que todo está bien a costa del endeudamiento y el plástico que nos domina.
En esta Navidad y Año Nuevo quienes si creemos en una sociedad del Buen Vivir, que incluye la afectividad del hombre, su espiritualidad -así sea creyente o no-, valore también la parte del ser intangible y su bienestar, valore el reconocimiento respeto y prestigio social, donde podamos desarrollar un debate político, filosófico, social, cultural, ético y económico, que nos lleve al desarrollo de una verdadera democracia, con respeto a derechos y deberes de una sana convivencia y Buen Vivir.
Sea utópico o no, es el deseo de muchos de nosotros para estas fiestas de fin de año, que nos lleve a un transformación raizal de nuestra sociedad.
Enrique Edis Jara Rivera.
Etiquetado
Señor Director: Ante la reciente polémica respecto a la ley de etiquetado consulto: ¿Es muy difícil indicar en cada etiqueta la cantidad recomendada de consumo? Me gustaría poder decir a mis hijos "Esto es lo que debes consumir", con toda propiedad, sin la duda si estará bien o no. Si bien es cierto hoy tenemos fácil acceso a la información por internet ¿quién se da el tiempo de buscarla por cada alimento que adquiere en un supermercado? Educar y difundir, pero sin contradicciones.
Ursula Lavandero Delgado.
Perdón, mentiras y olvido
Señor Director: Perdón, mentiras y olvido. Quienes deben pedir perdón son los responsables intelectuales del quiebre institucional del golpe de Estado del 73, no sus autores materiales. Además, Jarpa Wewar, Carlos y sus falsos exonerados políticos. También los otros falsarios como Navarro, Alejandro; Allende, Isabel, etc.
Todavía quedamos más de 80.000 (ochenta mil) exonerados políticos sin ninguna solución a nuestra histórica realidad. Por ejemplo, en febrero próximo se cumplirán treinta años desde que fuimos injustamente exonerados. ¡Por favor, desmiéntanme!
Edmundo Guíñez Cáliz. Escritor y Profesor de Estado en Castellano.
Educarse en la Universidad
Señor Director: Si uno llega a conocer un estudiante, la primera pregunta que le hace es: "Qué estudias"? y la segunda "¿En qué universidad estás?". Así se califica a un estudiante dependiendo de cuan "buena" es su universidad. Si la universidad es denominada "buena" o "mejor", se ve al estudiante como mejor, más inteligente, eficiente, activo y interesado.
¿Pero qué significa en verdad estar en una "mejor" universidad? Significa que a uno le acedan buenas herramientas para desarrollar sus capacidades y habilidades. Pero la mayoría de las cualidades necesarias para desempeñar en una carrera futura depende de la voluntad propia del estudiante de meterse a estudiar.
Hay una gran diferencia entre estudiar y estar. Estudiar significa aprovechar de las herramientas de una universidad para enriquecer y abrir la mente. Estar significa pasar las horas de clases metido en el celular y aprenderse de memoria lo más necesario para pasar el examen. Para poder estudiar se requiere interés en la materia y voluntad de mirar más allá de lo planteado en las horas de clase, algo que hasta en las universidades "mejores" se observa infrecuentemente.
Finalizando, y sobre todo para los alumnos que ingresarán a la universidad proximamente: La universidad abre mundos, pero no los entrega.
Florian Kriener, Estudiante de Intercambio en la U. de Chile.
Otra de don Evo
Señor Director: El señor Evo Morales y suma y sigue en sus ataques contra Chile. Primero nos mandó a la Haya y ahora al Hoyo.
Jorge Valenzuela Araya.