Familia oriunda de Pemuco vive complejo drama social
POBREZA. Los productos que más necesitan son leche de fórmula y pañales, los cuales no pueden cubrir con la pensión que posee por sus dos hijos postrados.
"No puedo mentir, no lo hemos pasado bien", decía Celmira Valdebenito a diario Crónica Chillán en 2009 cuando se encargaba del cuidado de sus 4 hijos con discapacidad en la comuna de Pemuco.
Ocho años después, el drama de Celmira sigue. Fallecieron dos de sus hijos, pero continúa todos los días en los cuidados de Pablo y Lila.
"No estoy bien de mi salud, ya me está pasando la cuenta el trabajo, tengo lumbago crónico y artritis", cuenta la mujer con un nudo en la garganta que parece que lleva hace mucho tiempo atragantado.
A los problemas de salud de Celmira, se suma que su hija Paola, quien era la que generaba ingresos para la familia, tiene retinitis pigmentaria y ha perdido el 80% de su visión, sin embargo, ella sigue tocando puertas buscando ayuda para sus hermanos y sus dos hijas.
Los ingresos que genera Manuel Martínez (padre de la familia) apenas suman para poder ayudar con los cuidados de Pablo y Lila.
"Con el paso del tiempo mis hermanos tienen problemas para comer y los recursos no alcanzan para comprar leche y pañales", cuenta Paola.
Leche y pañales
"Lo que ya me tiene complicada es el tema de los pañales y yo toda la vida he lavado pañales, pero ya el cuerpo me duele, no lo digo por flojera", dice Celmira.
Al mes, los hijos de Celmira utilizan 90 pañales cada uno, lo cual obliga a tener que seguir lavando en muchos casos. Mientras que la leche de fórmula que deben comprar es para contrarrestar el bajo peso que tienen.
Ayuda
Hace rato que las ayudas de las instituciones pararon y las pensiones que reciben por sus dos hijos de $93.000, no les alcanzan.
"Lo que buscamos es un apoyo porque con mi ceguera mi mamá se va quedar sola en los cuidados de mis hermanos", expresa Paola.
Lo que pide Celmira es si alguna institución o empresa puede apadrinar a sus hijos en lo que se refiere a los gastos de alimentación y pañales.
"No me estoy aprovechando de la situación, porque si fuera así, pediría el cielo y la tierra, pero es solo en la compra de la leche y los pañales", dice Celmira.
Esta familia que algún momento recibió ayuda hasta de la Presidenta Bachelet con una lavadora, hoy vuelve a vivir un drama social que se les hace más pesado y cuesta arriba con el pasar de los años.
Ayudas esporádicas
La última vez que Celmira Valdebenito recibió ayuda de la municipalidad fue hace más de un año cuando le hacían llegar dos paquetes de pañales (de 8 unidades) al mes. Mientras que de parte de la Gobernación la ayuda llegó por última vez hace 3 meses, donde también recibían pañales. La alcaldesa de Pemuco, Jacqueline Guíñez, indicó que "siempre la municipalidad los ha ayudado y se les tramitó una pensión, que obviamente no les debe alcanzar para mucho, pero por temas de contraloría las ayudas sociales son paliativas no permanentes. La verdad es que últimamente no los he visto por el municipio", señaló.