A juicio de los regantes que utilizan el afluente del río Ñuble para el riego de sus cultivos agrícolas, la problemática de escasez hídrica que se está evidenciando en nuestro territorio es cada vez más compleja y no está tan distante de la que hoy viven las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana y O'Higgins, en las cuales el Gobierno declaró Estado de Emergencia por sequía. Según el ejecutivo, la zona central del país enfrenta una de las sequías más importantes de los últimos 60 años, con un déficit de lluvias de un 70%. En nuestra zona, según los volúmenes observados en el río Ñuble por la Estación de la Dirección General de Aguas, el déficit llega a 46% respecto de un año normal, mientras que Meteorología cifra en un 34% la menor cantidad de precipitaciones, la que en todo caso supera en casi 100 mm lo registrado a igual fecha el año 2018.
Es importante consignar que, según el Instituto de Recursos Mundiales (WRI), Chile ocupa el lugar 18 entre los países que están con estrés hídrico en el mundo, lo que significa que la demanda por agua es superior a lo disponible. Al respecto, Raúl Orrego, ingeniero en recursos naturales de Inia Quilamapu, experto en Agroclimatología, es enfático en afirmar que el cambio climático tiene un efecto muy dramático sobre la disponibilidad de agua, al incrementar los eventos extremos y al reducir la disponibilidad de agua para la agricultura, lo cual requiere un cambio en planificación, las costumbres del agro y tecnología.
No obstante, también desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han observado la problemática que se vive en nuestro país con la sequía y advertido efectos en el mayor costo de los productos agrícolas que consume la población, lo que además produciría una mayor presión inflacionaria para nuestra economía, ya afectada por la guerra comercial entre China y Estados Unidos. En la ONU llaman a transparentar el stock de productos y a mejorar la planificación y la distribución de los mismos.
Por su parte, desde la óptica parlamentaria, el diputado Frank Sauerbaum ha enfatizado que Chile está perdiendo una gran oportunidad -y a la vez competitividad- al no aprobar el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico, o TPP-11, el cual permite una rebaja de aranceles hasta llegar a cero para varios productos agrícolas que hoy compiten en desventaja con países como Perú en los mercados del gigante asiático, debido a que la nación vecina ya tiene aprobado el acuerdo. En este sentido, son múltiples las problemáticas y las decisiones que se deben acelerar desde el ámbito de Gobierno y Congreso para mejorar la situación agrícola nacional. Sin embargo, en lo que a Ñuble respecta, de no destrabarse la construcción del embalse Punilla, los efectos a corto plazo serán más notorios y negativos para pequeños y grandes productores.