Inequidad y exclusión
Señor director: En diversos medios de comunicación se ha planteado que el empresariado recoge el guante del malestar social, haciendo un mea culpa respecto de las inequidades que hoy tiene el país. Sin embargo, no hay que olvidar que las inequidades, también generan exclusión. Se detalla que Chile hoy enfrenta una crisis de la institucionalidad, se reconocen malas políticas públicas, bajo nivel de educación y sentimiento colectivo de desesperanza, entre otros. Sin embargo, en ninguna parte escuchamos que en ese colectivo están los más marginados de los marginados, que suman más de 2 millones 600 mil personas. Hablo de las personas con discapacidad. Me gustaría escuchar que la propuesta de equidad de sueldo, es para todos y no solo para algunos. Que las personas con discapacidad que se incorporen a trabajar también ganarán un sueldo mínimo ético de 500 mil pesos propuesto por muchos en esta crisis. Tendríamos un verdadero cambio de sociedad si esta señal también se manifestara públicamente para las personas con discapacidad.
Andrea Zondek Presidenta Fundación TACAL
Sobrepasados
Señor director: Por mucho que se niegue, pero a la luz de los acontecimientos, no deja de tener sentido que la declaración de "Estado de Emergencia" y en ese marco "la salida de militares a las calles", a contar del sábado 19.octubre, se debió a que sí Carabineros se vio sobrepasado frente, en principio, a las "evasiones masivas" de estudiantes en el Metro de Santiago desde el lunes 7, haciéndoles correr de una estación a otra para evitarlas; a las protestas ciudadanas "pacíficas" posteriores, y al vandalismo generalizado llevado a cabo por "encapuchados", los descolgados de siempre de cuanta manifestación y marcha que, desde mucho antes, ha habido por distintos motivos, pero ahora con mucha más violencia y lamentables consecuencias, que han perjudicado directamente al pueblo: seguridad, transporte y abastecimiento.
Se les perdió el respeto y el temor, y además de ser "blanco" de pedradas y bombas molotov "caseras", también lo fueron de agresiones físicas directas, produciéndoles agotamiento, cansancio, que les hizo endurecer su accionar, empeorando la situación.
Así, el Gobierno creyó que con la nueva presencia de uniformados y con decretar "Toque de Queda" iba a revertirse la situación. Poco logró. La "desobediencia civil" ya estaba en marcha -se desafiaba dicha limitación de desplazamiento nocturno con permanencia en lugares públicos más allá de la hora señalada-, alentada y justificada desde la oposición, inequívocamente desde la izquierda tradicional, la ultra y desde la nea, pro la consecución de sus particulares fines: en lo inmediato la renuncia o sacada del poder -a través de una acusación constitucional- del Presidente Piñera, elegido democráticamente; llamar a una "Asamblea Constituyente", dejando de lado las numerosas demandas ciudadanas, transversales, que se reflejaron en la histórica "Gran Concentración Popular" en Plaza Italia de Santiago, con casi 2 millones de asistentes, realizada el pasado viernes 25, e investigar, con la mayor prontitud, el atropello de los DD.HH. y sancionar a quienes resulten responsables de dichos abusos, siendo blanco de ello también Piñera, como refuerzo para la acusación constitucional en su contra. ¿Desde dónde se les instaba a "unirse a la lucha", en lugar de reprimir? Con el recuerdo de lo vivido tras el Pronunciamiento o Golpe Militar de 1973, Chile vive hoy su propia "Revolución de Octubre". Ojalá no sea como la otra, que derivó en un régimen dictatorial, avasallador y atropellador de los DD.HH., no de miles, sino de millones de seres humanos: la ex URSS, nuestra otrora "Hermana Mayor", en palabras de Salvador Allende.x
Jorge Saavedra Moena
Chile más activo que nunca
Señor director: A pesar de las inclemencias vividas la última semana, los últimos dos meses de 2019 serán cruciales para que Chile fortalezca su posición de liderazgo internacional.
Somos un país exportador. Millones de personas participan en la producción y exportación, hay familias que viven de ello, las pymes requieren de nuevos mercados y en definitiva la APEC reúne al 70% de los países que compran nuestros productos. Asimismo, entre las demandas de los ciudadanos está vivir en un ambiente libre de contaminación y cuidado a nuestro entorno, temas que tratará la COP25 en diciembre.
Chile es reconocido por su estabilidad institucional, y no hay razón para pensar que esta vez deba ser diferente Dar paso a estos dos grandes eventos, no solo será una potente señal de confianza y madurez cívica que habrá dado el país, es un manifiesto crucial, de que estamos avanzando por un país más justo y equitativo, consiente de su contexto interno e involucrado como un gran agente de cambio internacional. Los chilenos, hoy más que nunca, no podemos quedar fuera de estos grandes procesos.Esperemos que de ka agitación se pase a la calma y acciones.
Tomás Orellana Bardavid