Adriana Guerra Robles

Luis Arraigada Muñoz trabaja como viejo pascuero en el Mall Plaza Arauco Chillán. Llegó a este oficio hace cuatro años, por el amor a los niños, y hoy lo hace inmensamente feliz. A lo largo de este tiempo ha conocido muchas anécdotas y grandes lecciones de vida junto a los más pequeños de la casa. Arraigada tiene 76 años, oriundo de Santiago es casado y disfruta de una familia grande con hijos y nietos . Durante el año se dedica 100% a disfrutar de sus nietos, pero cuando llega el mes de diciembre, deja todo por algo más que un trabajo, una pasión.

Este año, su sillón de viejo pascuero inició la temporada decembrina en el tercer piso del Mall Arauco Chillán durante 24 días consecutivos escuchando a los niños y niñas de la capital regional de Ñuble y recibiendo sus cartas de deseos. En sus años como Pascuero, cuenta que ha tenido muchas anécdotas, pero que también situaciones que lo han marcado como ser humano.

¿En qué consiste su trabajo y cómo comenzó esta linda labor?

-Mi trabajo consiste en recibir las cartitas y deseos de los niños para la navidad, tomarme fotos con ellos y acompañarlos porque ellos se sienten seguros que lo que me van a pedir a mí les llegará en Noche Buena a su hogar. Llevo cuatro años realizando esta labor tan bonita como lo es ser Viejo Pascuero antes lo hacía en Santiago porque soy de allá pero esta vez me vine a Chillán. Me motivé a realizar este trabajo porque me gustan muchos los niños tengo harta paciencia y lo principal es ser empático con ellos ponerte en su lugar eso es prioritario.

¿Qué hace durante el resto del año y cómo ve su familia su trabajo de Viejo Pascuero?

-Mi familia me apoya a que sea Viejo Pascuero a veces ando de compra y los niños me ven y dicen Ahí va el Viejito Pascuero! y mi señora me dice: No es el uniforme eres tú el Viejito Pascuero. Durante el año estoy en la casa tranquilo con mis nietos disfrutando de la vida, me apasiona lo que hago y me encanta llevar esa alegría y la magia que trae consigo la Navidad, ver las caras y escuchar los gritos de felicidad cuando los niños me ven me llena el alma porque la demostración de cariño hacia uno es sincera. Ellos lo sienten y reaccionan.

¿Alguna experiencia que lo haya marcado en su trabajo ?

- Si, tuve dos experiencias que me marcaron muchísimo. Fue en un evento donde un niño en silla de ruedas me pidió que le sanara las piernas hay me quebré totalmente (suspiro) porque no estaba en mi sanarlo y lo otro me pasó con una niña ciega que se acercó a mí y ella me tocaba con sus manos la barba, la cara, como para reconocer que de verdad era el Viejo Pascuero. También me pasó algo muy significativo cuando visité un centro de salud con niños con cáncer y ver cómo estaban me emocionó muchísimo.

¿Qué es lo más difícil de ser Viejo Pascuero?

- Los niños te cuentan tantas cosas que a veces a los papás no se los cuentan y realmente uno no tiene el poder de solucionarle lo que desean en ese momento pasamos a hacer como un consejero o psicólogo, también tenemos que tener mucho cuidado con lo que le aconsejamos a los niños siempre les digo que le hagan caso a la mamá y el papá que se porten bien en el colegio, que no peleen entre los hermanos y por sobre todo les digo que el hermano no le pegue a las hermanas porque es allí cuando se van formando los hombres maltratadores, adoptan esta conducta como algo normal, otras de las cosas que también les comparto mucho a los niños es que compartan con los que no tienen no solo un juguete sino también algo de comer.

¿Cuales fueron los regalos más solicitados por los niños Ñublensino?

- Los regalos que más me han pedido es el scooter , los Duendes Mágicos, Tablet y pokemones, además, recuerdo en particular dos niños que me pidieron sandia (risas) y otro un coyac, resaltar que siempre hay diferencias en las peticiones de algunos niños con otros porque algunos se conforman con una cuerda para saltar o pelota y hay otros niños que no me dicen lo que necesitan sino que viene con la tecnología y el teléfono con todos los juguetes y hasta donde encontrarlo.

¿Cuál es el mensaje que entrega para esta Navidad y Año Nuevo?

-Que tengan una muy feliz pascua con sus niños porque no es lo material lo que importa sino pasarlo en familia, en armonía con nuestros seres queridos, compartir sin tecnología en medio, mirarnos a la casa, compartir una palabra, un abrazo con nuestros hijos, sobrinos, nietos con toda la familia y amigos y además que tengan un feliz año 2020 mucho mejor que el próximo que es lo que todos deseamos.

El Viejo Pascuero estuvo durante 24 días en el Mall Arauco Chillán esperando en su tradicional sillón a los miles de niños que visitaron el espacio para dejar sus cartas y contarle en vivo y directo su deseos para esta Navidad. También compartió fotografías alusivas a la fecha de forma gratuita y abierta a toda la comunidad, fueron 10 mil 400 fotos que más que un papel impreso es un grato recuerdo.