Violencia
¿Acaso no es violento arrojar una bengala a un partido? ¿realizar un saqueo? ¿lanzar objetos contundentes o cortantes a otras personas, civiles o uniformadas? La respuesta parece que no es tan obvia, o al menos, el reproche a estos hechos no genera en Chile una mayoría clara.
La falta de acuerdo respecto de qué es violento y que no; es sin duda lo más reprochable de un fenómeno presente en la sociedad actual, sobre todo siendo un debate a nivel parlamentario, donde debiese primar el diálogo y la cordura.
A pasos del temido marzo, lograr frenar la violencia que impera hoy en Chile requiere de manera urgente que tanto las autoridades políticas como la ciudadanía dejemos de generalizar sobre lo que está pasando, y condenemos transversal y absolutamente hechos vandálicos.
Aunque sirva de poco el consuelo para los miles de víctimas directas de la violencia del último tiempo y de los millones de chilenos que sufrirán las consecuencias de este anunciado mes de movilizaciones, más vale prevenir que nunca haber hecho nada para evitarlo.
Renata García
Rabona
En el interior del mall Marina Arauco en Viña del Mar, el joven héroe que frustró un robo, demostró que sí se puede caminar (hablando por celular) y masticar chicle (realizar una cuasi "rabona" al mejor estilo del "Bichi" Borghi) al mismo tiempo.
Luis Soler
Energías
En medio de la incertidumbre que reinaba en general en el país con la llegada de 2020, en el ámbito energético el año ya trae algunas cuentas alegres que sacar, con cifras muy evidentes.
A enero de este año, el 38% de los proyectos actualmente en construcción corresponden a energía fotovoltaica, seguidos por los eólicos, con un 27%. Con estos contundentes números, las energías renovables están dejando atrás a otras fuentes tradicionales, que históricamente han generado una importante Huella de Carbono.
Si bien en los últimos tres años y en cuanto a capacidad instalada, la composición de las distintas fuentes dentro de la matriz ha sufrido leves variantes, cabe destacar que la energía solar por sí sola ya superó el 10% de la participación, prácticamente duplicando la cifra que ostentaba hace tres años.
Esto responde en gran medida a la política establecida en Chile, con miras a lograr la ambiciosa meta de descarbonizar el país para el año 2050. Pero al mismo tiempo, se debe a los permanentes esfuerzos de la industria, que ha sabido aprovechar las inmejorables condiciones para el desarrollo permanente de energías limpias.
Nataliia Savkiv, office manager de Solek
Agricultura
Convertir al país en una potencia agroalimentaria", así fue como el Presidente Piñera explicó la creación del nuevo Ministerio de Agricultura, Alimentos y Desarrollo Rural, que busca introducir mayor competencia en el sector agrícola, y una modernización de la cartera.
Se trata de una iniciativa que fortalecerá no solo al sector rural, y entregará mayores herramientas para poder convertirse en un sector pujante de la economía, sino que también consolidará a los sectores que se nutren de la agricultura, como la agroindustria.
La industria de los alimentos ha crecido fuertemente en Chile en los últimos años. Es cosa de ver las cifras. En 2014, se exportaban casi 767 mil toneladas de alimentos procesados, con una equivalencia de US$ 1.707 millones. En 2018, en tanto, se exportaron más de 800 mil toneladas de este tipo de productos a países extranjeros, evidenciando un crecimiento de 4,4% respecto de hace 4 años.
El potencial agroindustrial que tiene el país, mueve al CET Agro a generar las mayores y mejores oportunidades para generar una industria con valor agregado y que supere año a año sus límites.
Desde el CET Agroindustrial, creemos que la idea es poder aprovechar los recursos que tiene el país, usarlos de manera responsable y sustentable, y de esta forma ir generando un sector que va en línea con las necesidades y demandas de los consumidores. Así, el desarrollo de la agroindustria es un resultado natural que debe, mediante incentivos públicos y privados, convertirse en el futuro cercano en una real alternativa de desarrollo.
En el CET creemos que hay que seguir consolidando a Chile como una potencia alimentaria, debemos seguir alcanzando nuevos mercados, mayor tecnificación de nuestros procesos, mayor optimización de los mismos, incorporando los requerimientos técnicos que demandan los mercados, desarrollar nuevos productos.
El sector agrícola está viviendo momentos difíciles con una sequía que está afectando diferentes dimensiones de la industria. Sin embargo, el fuerte desarrollo del mundo rural es una de las formas que puede continuar fortaleciendo la agricultura.
Noemí Zúñiga, gerente del CET Agroindustrial