Evelyn Silva Cisterna
Las mujeres son una parte esencial en el desarrollo de esta nueva sociedad. Ellas trabajan en son de derribar ciertos paradigmas que, hace poco tiempo, inducían a la comunidad a mantener roles marcados. Son mujeres que, desde sus ámbitos, buscan generar cambios en las comunidades con la finalidad de lograr el progreso que necesitan para evolucionar.
"Defensora del agua"
Abogada feminista y protectora de los recursos hídricos, así se define Angélica Cuevas. Mujer decidida que lleva muchos años en Chillán trabajando, codo a codo, con la gente, ya que uno de sus principales intereses es la participación ciudadana, faceta que desprende siendo miembro de la Asociación Parque Juan Schleyer y de la Coordinadora Ambiental Ñuble Sustentable.
"El tema ambiental es lo que más me motiva. Hace poco creamos la alianza del agua, pensando en la escasez que poseen algunos lugares de Ñuble y que la gente se debe abastecer por medio de camiones aljibe. Por eso, tenemos como objetivo luchar para que este elemento sea un derecho humano ambiental, que sea básico y al mismo tiempo accesible para todas las personas", sostiene la abogada.
Apoyar este ámbito nació de la consciencia y empatía de ponerse en el lugar del otro. De darse cuenta de que este recurso tan esencial para el ser humano no estaba siendo igualitario. "Va más allá de un conflicto ambiental, sino que es social. Es bastante complejo e importante que muchas personas no le prestan atención porque no entienden la significancia que esto conlleva. Estamos en una región que nació con índice de alta pobreza y ruralidad", dice Cuevas.
A raíz de eso surgió la alianza por el agua. "Te das cuenta que es un recurso humano escaso y que en Chile, lamentablemente, es mirado como un bien económico que está sujeto a derecho de propiedad. Es un tema de inequidad", expresa Angélica.
Para ella la paridad, en todos los sentidos, es importante. Aspecto que en 2018, cuando inició el revuelo feminista, la llevó a unirse, a este movimiento, porque apoya los derechos de las mujeres y realza la posición de estas en la sociedad.
"Es muy positivo que hoy en día las mujeres ya no estemos solas. El hecho de que nos una un sólo propósito, es un cambio que necesitábamos, sobre todo, visibilizar la violencia que se veía bastante normalizada. Ahora existe una mujer capaz de decir: 'No quiero más, ya basta'. Creo que somos un gran aporte social, que nos permitirá avanzar", opina la profesional.
En el arte
Carmen Gloria Mella, nació en Concepción, pero cuando pequeña se trasladó a vivir a Chillán. Aquí, a los 8 años, comenzó a estudiar violín, arte que la llevó a ser parte del Conservatorio de Concepción y de su sinfónica. Luego, de descubrir la pedagogía, empezó a hacer clases. Ahora lleva 15 años enseñando en la Escuela de Cultura Artística de Chillán.
A ella la mueve la pasión por entregar este arte a sus alumnos, a quiénes inculca que la música no ve géneros. "Lo lindo del arte que no hay mucha diferencias. Si eres músico no importa si ser hombre o mujer, lo que vale es tu nivel profesional, la calidad de tu trabajo y lo que expresas", piensa la violinista.
Día a día, intenta trasladar la simetría que ella desarrolla en el espacio musical, a lo público. Aspecto que sabe que es muy difícil de lograr, pero que con la lucha que están haciendo las mujeres se podrá superar. "Hay muchas diferencias, es un tema ser mujer y que no te validen mucho, competir con eso es complejo, pero creo que el arte ayuda a superarlo. Por eso desde mi posición de profesora, por medio de la educación he podido formar seres con valores distintos", cuenta Carmen Gloria.
El respeto hacia las personas y fijarse en las sensibilidades, para ella esa es la clave que derribará la discriminación que se genera en la sociedad. "La mirada del arte es el ideal, porque no hay desigualdad. En cambio, fuera de este mundo sí luchamos por esas inequidades. Por eso, me alegro mucho que la mujer se esté empoderando de los espacios que le corresponden. Apoyo la fuerza y potencia que tenemos, características que crearán un mundo más equilibrado", afirma Mella.
Primera Comisaría
Karen Riveros se transformó en la primera Mayor de Carabineros de Ñuble. Desde sus inicios, tuvo que aprender a desenvolver su disciplinado trabajo en un espacio que siempre han dominado los hombres.
"En un período de perfeccionamiento, una de las dinámicas fue manifestar alguna propuesta de posible traslado. Pensé de inmediato en Ñuble, no era de la región, pero algo sabía", recuerda la mayor.
Ahora, tras asumir el cargo de Comisario líder de la 6ta. Comisaría de Chillán Viejo, todavía no dimensiona que se adjudicó esa categoría que la ha llevado a desprender todo su potencial y liderazgo.
"Aunque fue una novedad, estoy feliz de haber conseguido mi objetivo. Cuando llegué tenía cierta inquietud y ansiedad, porque ejercer el mando de comisario y hacerme cargo de una unidad policial, la que tiene una cantidad importante de funcionarios, donde la mayoría son hombres, era un gran desafío. Estoy súper satisfecha, los carabineros han respondido bien a todo lo que se les impone, sobre todo a las instrucciones. En realidad, se da una dinámica de trabajo muy enriquecedora porque hay apoyo constante", dice Riveros.
En cuanto a sus proyecciones, "el desafío es estar al mando de mujeres y hombres que lo que buscan es el bien. Así, mantener las comunas dentro de los marcos de normalidad y seguir trabajando con la comunidad, desde la confianza", añade la oficial de Carabineros.
"Presidenta de lo social"
Siempre sintió la necesidad de entregarse en servicio de la comunidad. Lo que llevó a Miriam Garcés, postularse como presidenta de la junta de vecinos del sector centro de Chillán, puesto en el que lleva 20 años.
"Quedó botada la junta de vecinos y justo yo andaba en la búsqueda de una actividad de entrega. Ahí me presenté en una reunión que hicieron en la Escuela República de México", recuerda Miriam.
Siempre su afán fue tener un espacio para socializar con sus vecinos. Tras ser elegida, se empeñó en que se construyera una sede social, un sueño que anhelaba.
"Nos costó lágrimas tener un espacio para que nuestros vecinos se pudieran reunir. Empezamos a buscar dónde podíamos instalar esta sede", dice Garcés.
Hoy, gracias a esta mujer y al comité, la sede forma parte esencial de esta zona, ya que está abierta a la comunidad, facilitado que diversas organizaciones desarrollen sus actividades.
"Considero este lugar como un hogar, me ayudó a que renacieran mis habilidades intelectuales y sociales, que en mi calidad de mujer sometida en la casa, no podía desarrollar. Por otro lado, hemos podido reforzar nuestros lazos como vecinos, compartir valores y servicios, aspectos importantes para el progreso de la comunidad", finaliza la presidenta de la junta de vecinos del sector centro de la comuna.
"Hace poco creamos la alianza del agua, pensando en la escasez que poseen algunos lugares de Ñuble. Por eso, tenemos como objetivo luchar para que este elemento sea un derecho humano".
Angélica Cuevas,, Abogada