Medida para cuidar el medio ambiente
En su última etapa de aplicación, la ley que obliga a la reducción de las bolsas plásticas ahora aplica también para todos los pequeños y medianos comercios. Las bolsas plásticas fueron muy apreciadas en un comienzo por lo fáciles de transportar, su ductilidad y por su aparente limpieza.
El reciente lunes se ha dado un nuevo paso en la reducción de las bolsas plásticas en Chile, por lo que ahora la disposición no solo se aplica a las cadenas de supermercados y multitiendas, sino también a pequeños y medianos comercios. No hay que olvidar que el 3 de agosto de 2018 se publicó en el Diario Oficial la Ley Nº 21.100, del Ministerio del Medio Ambiente, que prohibió la entrega de esas bolsas en el retail, y que transformó a Chile en el primer país latinoamericano que dio este gran paso, para contribuir a la protección de la naturaleza.
El texto legal consideró un período de transición de seis meses desde su publicación, para que las tiendas y supermercados dejaran de entregar bolsas de plástico a sus clientes, lo que ocurrió a contar del 3 de febrero de 2019. En el caso de las pequeñas empresas, se les dio un plazo hasta el 3 de agosto de 2020 para adaptarse a la normativa. De la legislación quedaron excluidas las bolsas que constituyan envase primario de alimentos, que sea necesario por razones de higiene o porque su uso ayude a prevenir el desperdicio de alimentos.
De acuerdo con cálculos de la Asociación de Industrias de Plástico, en nuestro país y hasta antes de la vigencia de la mencionada ley, se usaban más de 3.400 millones de bolsas al año, lo que generaba serios problemas ambientales, si se considera que muchas de ellas terminaban en el mar, en los ríos y lagos, en momentos en que la humanidad trata de tomar medidas para preservar el planeta.
Dejar atrás el uso de materiales que, al ser desechados, se convierten en desperdicios de difícil eliminación, con el consiguiente daño a la naturaleza, es un desafío para todo el mundo. Las bolsas plásticas fueron muy apreciadas en el comienzo por lo fáciles de transportar, su ductilidad y su aparente limpieza. Sin embargo, también arrastraban su condición de prescindibles, y así como sirvieron para el traslado de productos hacia el hogar se les utiliza para desprenderse de lo que ya se usó.
Por lo mismo, es muy necesario seguir avanzando en un cambio cultural para que todas las personas entiendan la necesidad de proteger el ambiente.