Salud mental infantil
En Chile, niños y niñas siguen teniendo tasas de morbilidad en salud mental de nivel mundial. Según el último estudio de Carga de Enfermedad y Carga Atribuible realizado en nuestro país, los años de vida perdidos por discapacidad o muerte, determinados por condiciones neuropsiquiátricas, corresponden a un 30, 3% en niñas y niños entre 1 y 9 años. Entre sus gatillantes, se reconoce el importante papel de las condiciones de desigualdad y pérdida de cohesión social. La pandemia, ha intensificado dichas condiciones para las familias por la crisis sanitaria, económica, duelo y soledad en la crianza. Para los más pequeños, ha implicado, además, la pérdida de su casi único espacio de socialización, como lo son el jardín infantil y la escuela. Ellos son sujetos sociales, que sufren tanto su realidad como la falta de vínculos con otros adultos y pares- fundamentales para su desarrollo integral- impresionando un aumento de sintomatología psicoemocional. Lo anterior, junto al bajo presupuesto público, acentúa el invisibilizado y precario escenario de Salud Mental de la primera infancia en Chile. Resulta fundamental abordar este impacto desde la política pública y la sociedad civil, donde apoyar la crianza y socialización infantil, se reconozca como una forma de cuidar de la salud mental de niñas y niños.
Angélica Valdebenito Díaz Psicóloga Clínica y Directora Ejecutiva (S) Casa del Encuentro- Fundación Santa Ana
Los cimientos de un nuevo Chile
Tengo la certeza que el proceso que estamos viviendo hoy, es sin duda, una gran oportunidad para que, como sociedad, construyamos en conjunto la visión de un Chile mejor para los próximos 50 años.
La clave para enfrentar este desafío estará en la capacidad de todos para buscar soluciones a los problemas y preocupaciones comunes, de ser conciliadores, de estar abiertos a la diferencia y ser respetuoso de ella, buscando siempre lograr acuerdos en beneficios del bienestar de las personas, de la sustentabilidad del medio ambiente y del desarrollo de nuestra región y país.
En ese sentido, una de las tareas prioritarios será el reconocimiento constitucional los pueblos originarios, de su cultura y forma de vida. Por ende, avanzar hacia la pluriculturalidad y nacionalidad.
Otro tema relevante, será el concepto de equidad, pero equidad en toda su extensión, partiendo por los aspectos propios de las personas en cuanto a la igualdad de acceso a condiciones y derechos, la igualdad laboral efectiva entre hombres y mujeres, la igualdad de oportunidades para el desarrollo comunal y regional del país, mayor autonomía regiones eliminando el centralismo en la asignación de los recursos, en la toma de decisiones. No cabe duda de que la elección de gobernadores es un paso significativo que debemos profundizar.
Otro de los temas en los que quiero centrar esfuerzos, es el de derecho que todos tenemos de vivir en un ambiente libre de contaminación, pero debemos ponerle apellido a ese derecho, debemos reconocer la particular condición ecológica de cada ambiente, en adelante debemos hablar de un derecho de vivir en ambientes ecológicos sanos.
El proceso de redactar una nueva Constitución es el desafío de mayor envergadura para cualquier país y estamos llamados a hacerlo con convicción y respeto a la diversidad de opiniones.
Jorge Serón
Medidas
Las medidas del plan Paso a Paso del Gobierno no han estado libre de polémicas y últimamente han puesto en duda el manejo del control sanitario de la pandemia. La prohibición de venta de productos no "esenciales", o medidas como la prohibición de música en restaurantes de comunas en fases 2 y 3 -la cual, afortunadamente, se estableció después como una irrisoria "recomendación"-, dejan en claro no solo un bajo aprecio a la cultura y salud mental, sino también una disposición a violar libertades personales en una especie de ensayo y error continuo.
Lo curioso de esto es que hace un mes se pensaba que las restricciones serían similares a las utilizadas en el año 2020; sin embargo, las medidas actuales reafirman esos miedos internos y aquellas hipótesis de avance estatal sobre nuestra individualidad, dejando de parecer fantasías y mostrando tintes de realidad. ¿Serán capaces las autoridades de distinguir estas transgresiones al individuo -ya sean por presión, desprolijidad, comodidad o todas las anteriores- o el hecho de vivir aprisionados hoy es solo un indicio de lo que viene a futuro?
Sebastián Millán Calisto Fundación para el Progresox