Alejandro Torres Caamaño

Según cifras proporcionadas por la Seremi de Vivienda y Urbanismo en Ñuble, a la fecha, el déficit cuantitativo en la región es de 5 mil 069 viviendas. Esto de acuerdo a los registros de la última encuesta Casen 2020, más los campamentos existentes a 2021. Por otra parte, la cantidad de viviendas terminadas desde que Ñuble es región es la siguiente: la cifra en 2019 alcanzó las 1.131 viviendas; en 2020 fueron 684, mientras que en el presente año van 551, con datos al 30 de septiembre, lo que en su totalidad suma 2 mil 366 viviendas.

Ahora bien, en materia de adquisición de vivienda, vale mencionar que recientemente el gerente de estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Javier Hurtado, advirtió que por cada punto que sube la tasa de interés, aumenta un 14% el dividendo. Considerando la cifra anterior, a propósito de la inflación y con ello el alza en la tasa de interés de los créditos, a nivel local, manifestaron que una de las complicaciones que deriva en lo dificultoso de adquirir una vivienda es el alto costo de los materiales de la construcción.

A juicio de Raúl Bravo, encargado macrozonal de la Federación Nacional de Pobladores de Chile (Fenapo) Ñuble, uno de los factores que más incide en el costo de las viviendas es el alza en los productos de la construcción. Tanto así, que explicó que actualmente los presupuestos de entidades públicas como Serviu no alcanzan para la realización correcta (en materia presupuestaria) de un proyecto de, por ejemplo, viviendas sociales, según declaró.

"Hay que ver de dónde viene el alza; el tema presupuestario y de alza de precio es un problema que nos sucedió hace muy poco con un comité de vivienda que teníamos, que estuvo a punto de ingresar un proyecto a Serviu, pero los materiales de construcción se fueron al alza y el proyecto quedó desfinanciado. Hubo que hacer milagros para conseguir dinero por otro lado para que el proyecto fuera ingresado. Es una problemática que viene por el tema pandemia y el estallido social, que subió la mano de obra, escasea, y los productos desaparecieron y todo subió", dijo.

Por otra parte, en cuanto a los subsidios otorgados, desde la Seremi de Vivienda y Urbanismo mencionar que en 2019 fueron 4 mil 112 los que se otorgaron, mientras que en 2020 la cifra ascendió a un total de 4 mil 372 subsidios otorgados. Para el presente año y con cifras al 30 de septiembre, la cantidad se sitúa en 2 mil 591 subsidios entregados en la Región de Ñuble.

Encarecer viviendas

Recientemente el Banco Central aumentó la tasa de interés en 1,25%, situación que impacta directamente al momento de adquirir una vivienda. Lo anterior ya que de acuerdo a estudios de la Cámara Chilena de la Construcción, se indica que por cada punto que sube la tasa de interés, aumenta un 14% el dividendo.

Al ser consultado si se complejiza la compra de viviendas en la región con este nuevo escenario, Ricardo Salman, presidente del Comité de Vivienda e Inmobiliario de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Chillán, precisó va a provocar complicaciones a las familias por las rentas más altas que van a exigir para optar a los créditos, afectando con ello a las empresas que ya hay proyectos vendidos en fase de terminación.

"Creemos que se va a generar una complicación extra para las familias, ya que muchas no van a poder adquirir las viviendas debido a que les exigirán una renta más alta, ya que si estaban pensando en una casa de 3 mil UF ahora tendrán acceso a una de 2 mil UF seguramente. Pero también va a afectar a las empresas ya que, si actualmente hay proyectos vendidos en proceso de terminación de obras, se pone en duda si los interesados continuarán cumpliendo con las condiciones para concretar la compra. Esto significa que las empresas van a ver desfasadas sus recuperaciones y con ello el ciclo de construcción de sus proyectos, lo que decantará en que muchas familias que están inscritas no podrán acceder a su compra, ya que para inversiones de una casa de 3 mil UF actualmente se requiere de una renta aproximada de 1 millón de pesos y dados los cambios de reducción de plazo e incremento de tasas y la baja de plazo de 30 a 20 años o menos quizás, la renta exigida se elevará de 1 millón a 1 millón 600", explicó, añadiendo que "por lo tanto, habrá un retroceso tanto para las familias como para las empresas lo que se traduce en una ralentización del flujo de los procesos de adquisición de viviendas", aseguró Ricardo Salman.

"Creemos que se va a generar una complicación extra para las familias, ya que muchas no van a poder adquirir las viviendas debido a que les exigirán una renta más alta".

Ricardo Salman

Pdte. Comité de Viviendae Inmobiliario de la CChC Chillán