Impacto de la inflación en nuevas generaciones
Hoy la inflación es un factor que se debe considerar al momento de controlar el presupuesto mensual
Hace poco difundieron la variación del IPC para agosto y lo acumulado en el año 2022. Claramente, las expectativas han ido quedando cortas y saber que llevamos acumulado un 9,9% en el año, o que los precios han subido un 14,1% en doce meses, era impensado algunos años atrás.
Desde inicios de la década de los 90 no veíamos variaciones de IPC por sobre los dos dígitos, por lo tanto, para las personas más jóvenes, estos indicadores económicos eran desconocidos, ya que el crecimiento descontrolado del nivel de precios había dejado de ser un problema en nuestra economía.
Quienes somos de las denominadas generaciones X e Y, vivimos en los años 90 el trabajo de un Banco Central autónomo cuyo foco fue el control de la inflación.
La disminución fue paulatina y se logró llegar y mantener por años inflaciones en torno al 3% anual, tasa también llamada ancla nominal. Salvo situaciones muy puntuales de alzas de precios por determinadas condiciones de ciclos económicos a los que nos vimos expuestos, nuestros precios crecían de forma controlada.
Sin embargo, el comportamiento de la inflación el último año es absolutamente anormal dentro de la realidad de indicadores económicos que les había tocado vivir a las generaciones más jóvenes. Lamentablemente, esto implica que el presupuesto familiar se ha visto cada mes más ajustado, porque los incrementos más altos se han dado en bienes y servicios de consumo masivo y transversales a todos los sectores socioeconómicos y edades: alimentación, combustibles y transporte, entre los más relevantes.
La variación en la división de Alimentos y bebidas no alcohólicas es de un 21,7% en los últimos 12 meses; de la división Transporte, un 27,8% en el mismo periodo y de la división Recreación y cultura, de un 16,9%. Las cifras anteriores impactan negativamente entonces en el poder adquisitivo de nuestra moneda e ingresos, pues claramente una misma canasta de bienes ya no se puede mantener.
Hoy la inflación es un factor que se debe considerar al momento de controlar el presupuesto mensual, y que debiese ser tema de conversación para poder identificar, a nivel doméstico, las mejores estrategias para sortearla y así, disminuir su impacto para no promover otro problema de nuestra economía: el endeudamiento por exceso de consumo.
Karin Bravo Fray,
Directora de Postgrados, Universidad San Sebastián