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Mapa mundial de miles de especies de aves en peligro de desaparecer

Casi la mitad evidencia un declive en sus poblaciones, no importa la zona del planeta en la que se indague. La agricultura, la tala de árboles y las invasoras son los grandes problemas, pero afectan además la caza ilegal y el cambio climático.
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E l 49% de las 11.000 especies de aves en el mundo -5.245 son taxones- experimenta un declive en sus poblaciones, según un informe de la organización SEO/Bird Life publicado esta semana en el marco de la celebración del Día de las Aves en Europa, que tuvo lugar ayer, 1 de octubre.

El estudio titulado "Estado de las Aves del Mundo" señala que en 1.409 de los casos un 13% del descenso es tan marcado que han entrado "en peligro de extinción" y eso significa, según la ONG, que una de cada ocho aves en el mundo está amenazada y solo un 6 % de los taxones crece.

De las 1.409 especies amenazadas, 231 están en peligro crítico, según un comunicado de la organización.

El documento es un compendio a escala mundial que realiza BirdLife International cada cuatro años, según un comunicado de la organización, que alerta de que se está produciendo un "deterioro" de la conservación de la mayoría de las poblaciones de aves.

Disminución generalizada

Más allá de las extinciones, los autores llaman la atención sobre la disminución generalizada de poblaciones de aves que, hasta la actualidad, se consideraban comunes, como el gorrión o la golondrina, especies que "eran prácticamente ubicuas", especialmente en las latitudes templadas del planeta.

Según SEO/Bird Life, en conjunto, el 33% de los impactos sobre la biodiversidad en América del Sur y el 26% en África es propiciado "por el consumo en otras partes del planeta".

De acuerdo a los datos del estudio, desde 1502, data en la que se fecha la extinción de una abubilla de grandes dimensiones en la isla de Santa Elena, en el océano Atlántico, han desaparecido por completo en torno a 187 especies de aves.

Según el estudio, todos los territorios en el planeta albergan, al menos, una especie de ave en peligro de extinción, una lista encabezada por Brasil e Indonesia, con 175 y 171 especies en riesgo de desaparición, respectivamente.

En España, están en situación de peligro extremo: el urogallo cantábrico, la cerceta pardilla, el alcaudón chico y la pardela balear, y "otras 53 están en las categorías de en peligro crítico y en peligro".

En la Unión Europea, desde 1980, se han perdido 620 millones de aves, mientras que en Norteamérica, una superficie cinco veces mayor, en los últimos cincuenta años se contabilizan 3.000 millones de aves perdidas.

Las más afectadas por el declive son las aves migratorias de largo recorrido, como las aves marinas, así como las aves ligadas a praderas, estepas y agroestepas.

Japón, un exterminio

Norteamérica y Europa lideran los datos del estudio gracias a las series más prolongadas de datos, pero los investigadores de BirdLife International subrayan que la reducción de poblaciones se produce en todo el mundo. No obstante, destacan que en Japón entre 1805 y 2016 se ha perdido el 96% de los ejemplares de especies forestales y las ligadas a humedales han caído un 88 %.

Además, en Kenia, entre 1970 y 2020, las rapaces han caído un 70%; en la India, entre 2000 y 2018, se perdieron el 62% de aves asociadas a bosques y se observa un declive del 59% de aves ligadas a praderas y matorrales y existen un 47% menos de aves de humedales.

En Costa Rica, las poblaciones de aves de campos agrícolas tropicales disminuyeron entre 1999 y 2010, mientras en Australia las aves marinas han perdido un 43% de ejemplares entre 2000 y 2016.

Entre los principales factores que provocan el declive global de las poblaciones de avifauna, la ONG señala la expansión e intensificación de la agricultura, que afecta al 73% de las especies amenazadas; la deforestación y tala de árboles, que impacta sobre un 50% de especies; y las especies exóticas invasoras y otras problemáticas, sobre un 40%.

Asimismo, la caza, fundamentalmente la ilegal, impacta sobre un 38%; los fenómenos del cambio climático afectan a un 34% de las especies amenazadas y, por último, el desarrollo urbano representa un efecto negativo sobre 27%.

La directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, asegura que con estos datos, conviene preguntarse, "si eso está pasando a las aves, con las que compartimos aire, agua o alimento, ¿cómo nos afecta a nosotros esta situación?. El hecho de no contar con un medioambiente sano tiene consecuencias directas sobre nuestra salud, nuestra calidad de vida y nuestra esperanza de vida".

El desarrollo urbano representa un efecto negativo sobre el 27% para las aves.

1.409 especies están amenazadas, 231 de ellas en peligró crítico de extinción y el 13% en peligro de extinción tras marcados descensos en sus poblaciones.

187 especies de aves han desaparecido por completo desde el año 1502, fecha de extinción de una enorme abubilla en la isla de Santa Elena, en el océano Atlántico.

Tanzania: la silenciosa expulsión de los masái de sus tierras

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El Tribunal de Justicia del Este de África (EACJ) dio esta semana la razón al Gobierno de Tanzania, en un caso en el que el pueblo masái demandó a ese país por su plan para desalojarlos de su tierra ancestral con el fin de crear una nueva reserva de fauna para la caza y el turismo.

El tribunal, con sede en la ciudad tanzana de Arusha, dictaminó que la demanda de la comunidad masái queda "desestimada por falta de mérito".

Los demandantes habían pedido al EACJ que detuviera los "desalojos, la detención y la persecución" de los miembros de su comunidad, así como una indemnización de 439.000 euros a la que no accedió la corte.

El tribunal también negó que el Gobierno tanzano violara la carta que establece esa corte, como alegaban los masái.

A principios de junio, las autoridades anunciaron su intención de crear una nueva reserva de fauna en la división de Loliondo del distrito de Ngorongoro, lo que implicaría el desplazamiento forzoso de más de 70.000 personas del pueblo masái.

Las comunidades masái organizaron protestas masivas y las fuerzas de seguridad dispararon gases lacrimógenos y munición real, hiriendo a decenas de personas, informó el abogado pro derechos humanos, Joseph Oleshangay. Además, hubo al menos dos muertos, un policía y un manifestante.

Desde entonces varios miles de personas, incluidos más de 1.500 niños, han tenido que abandonar sus hogares por las embestidas de las fuerzas de seguridad tanzanas.

La sentencia del EACJ, que estaba prevista para junio pasado, se aplazó por los violentos enfrentamientos entre la policía y los vecinos de Loliondo.

La empresa Otterlo Business Company (OBC), con sede en Emiratos Árabes Unidos, ha mostrado en varias ocasiones su interés por crear y gestionar en Loliondo una nueva reserva de fauna con más de 1.500 kilómetros cuadrados, con el objetivo de organizar safaris de caza.

Sin embargo, las comunidades masái detuvieron sus planes en 2018, cuando los jueces prohibieron al Gobierno desplazar a las personas que vivían allí hasta emitir su veredicto final.

El pasado 23 de junio representantes de las comunidades masái exigieron ante la sede de la ONU de Nairobi que sus derechos fueran respetados y que las autoridades no los expulsen de los terrenos que han habitado durante generaciones. Los masái pidieron entonces a la comunidad internacional que presione al Gobierno tanzano para "retirar al Ejército de nuestras tierras" e "iniciar un diálogo en igualdad de condiciones".

Las protestas han dejado dos muertos.