La inflación sigue siendo uno de los principales problemas de los chilenos, qué duda cabe, pero con la cifra del IPC de septiembre informada recientemente por el INE, se abre la pregunta y el debate: ¿se produjo un cambio de tendencia y con ello un respiro a la inflación?...
La variación mensual del IPC en septiembre registró un 0,9%; con lo que la inflación acumulada al noveno mes del año llegó a 10,8%; y un alza a 12 meses de 13,7%. Si la inflación acumulada y anual sigue estando aún por sobre los 2 dígitos, ¿por qué parte del mercado toma como "positivas" y "alentadoras" las últimas cifras de septiembre?; ¿realmente estarían indicando que la inflación ha llegado a su peak y comenzaría a descender?
Tenemos que el dato de IPC mensual de septiembre (0,9%) estuvo en línea y de acuerdo a lo esperado por el mercado, y no como había sucedido en meses previos donde típicamente el guarismo superaba a las expectativas o se ubicaba en la parte superior de las mismas. Por otra parte, desde marzo de 2021 que la inflación anual venía mostrando una tendencia alcista medición tras medición, es decir, 18 meses consecutivos donde la inflación a 12 meses solo supo de alzas. El reciente dato de septiembre se convierte así en la primera desaceleración de la inflación anual luego de un año y medio de alzas. Una tercera señal es que la inflación mensual anotó en septiembre su segunda desaceleración consecutiva. Estos elementos entregan una luz de esperanza en el complejo escenario de precios que vive nuestro país. Esto no significa que estemos cerca de acabar con la inflación, o que vayamos a volver a los niveles de precios pre pandemia; pero es positivo que las ultimas cifras estén mostrando señales de una desaceleración del nivel de precios, ya que estaría indicando que se habría tocado techo y pon ende, comenzaría lentamente el descenso en las mediciones venideras.
El Banco Central hace un tiempo ya había proyectado que pasado mediados de este año llegaríamos al peak de inflación. Es que la agresiva política monetaria restrictiva aplicada por el instituto emisor, elevando los tipos de interés a niveles históricos (10,75%), en algún momento debía comenzar a dar frutos, y ese momento pareciera estar comenzando. Con todo, estas "señales" parecen indicar que existen elementos suficientes para esperar un cambio de tendencia en los precios a partir de septiembre, sin embargo, la prudencia reza que será necesario esperar la siguiente medición de octubre para confirmar el quiebre de tendencia; esto, dado que la economía y en especial la inflación nos han regalado sorpresas este último tiempo, y también hay una "señal inversa": el alza anual de los alimentos lleva 10 meses consecutivos, inclusive septiembre.
Patricio Ramírez R.
Coordinador Observatorio Económico
y Social Universidad de La Frontera