Antes de que se cumpla la primera quincena de diciembre, debieran estar embarcado los envíos de cerezas con destino a China,a fin de llegar a tiempo al Año Nuevo en ese país, y conseguir mejores precios de venta.
Así lo detalló Daniel Monsalves, productor de la fruta en la comuna de Quillón, quien afirmó que la fecha máxima para emprender rumbo hacia orientes es el 11 o 12 de diciembre.
"La fruta que salga después del 11 o 12 de diciembre ya no va a alcanzar a llegar al Año Nuevo chino, así que hay que aprovechar de enviar todo lo que sea posible antes de esa fecha", dijo el productor.
En el caso de la fruta de exportación que se produce en Quillón, la mayoría está saliendo por Talcahuano, relató Monsalves, "hasta el momento no hemos tenido problemas de transportes, por lo menos hacia la planta que enviamos nosotros, que envía containers a Talcahuano, aunque a veces se envía al puerto de San Antonio".
Las variedades lapins y regina son las que más están saliendo hacia el mercado oriental y, aunque hay muchos predios cereceros con aquellas variedades en Quillón, no todos consiguen exportar sus productos.
Monsalves aseguró que "el tema es que para exportar está muy difícil, el programa fitosanitario es muy estricto. Desde cuando terminamos la cosecha en adelante hay que seguir un programa al pie de la letra, y varias exigencias".
Añadió el productor que "la pura certificación cuesta varios millones, muchos trámites, y lo otro es implementar todas las exigencias de las autoridades para tener el visto bueno de la certificación".
Pese a todo, las expectativas son altas, en relación a la apuesta que significa embarcar la fruta hacia China.
Después del 12 de diciembre, sostuvo Monsalves, hay que pensar en vender en el mercado local.
"El descarte de exportación se está vendiendo a 150 pesos el kilo, y ese precio es el que manda, lamentablemente", dijo el productor.
"En La Vega el kilo de cereza va a valer $400 y a estas alturas ya no hay solución posible para eso", se lamentó.
Cerezas tardías
Álvaro Gatica, productor de cerezas y vicepresidente de AsoÑuble, afirmó por su parte que, sobre todo en los predios al norte de Quillón, "recién está empezando fuerte la cosecha de cerezas de exportación en la zona, así que estamos contra el tiempo, porque ya la próxima semana, hasta el 12 de diciembre, debería irse la fruta para llegar al Año Nuevo Chino".
El productor reconoció que "estamos ya casi al límite para enviar, porque el 90% de la fruta de la zona es tardía, pero hay que esperar la madurez, no se puede cosechar cuando el productor quiera, tiene sus tiempos".
Gatica descartó, eso sí, quela fruta que no salga hacia China afecte el precio del mercado interno ya que, aseguró "se trata de otras variedades de cereza, que no aguantarían el viaje necesario para la exportación".
Aunque la apuesta es grande, por los plazos que corren, el transporte hacia los puertos están funcionando de buena manera, "tuvimos el problema de los fletes con el paro de los camioneros, pero ya está superado".
Faltan plantas para procesar
Álvaro Gatica aseguró que uno de los problemas adicionales que enfrentan los productores locales es casi que no hay plantas para procesar las cerezas en la región, sólo una. El resto, están todas hacia la zona central del país. "La fruta de la región se va casi toda hacia el norte, porque lamentablemente no hay plantas de procesos en Ñuble, hay solamente una, y es algo que hemos planteado en retieradas oportunidades, pero no ha tenido solucisón. Es por ese motivo que la mayoría de la fruta local se va por San Antonio y no por Talcahuano", detalló el productor y dirigente.