El Reto: Inteligencia Artificial acompañada de valores
Ahora se suma la Inteligencia Artificial (IA) que ha llegado para quedarse, ser parte de la cotidianidad y para los nativos digitales será una herramienta más de la vida
Eldebate máquina versus humano se remonta a los tiempos de Aristóteles (siglo IV A.C.) cuando se pensaba que éstas podían sustituir a los esclavos, luego con el paso del tiempo otro filósofo, Karl Marx tuvo una visión más optimista y consideró que estás podían aliviarnos el trabajo.
Desde ese momento hasta ahora, los avances tecnológicos y científicos han tenido como fin mejorar la calidad de vida de las personas, pasando desde la invención de la imprenta, la electricidad, el teléfono, la computadora hasta llegar a esta era digital.
En todos estos momentos, la educación y la producción del conocimiento han estado presente y seguirán vigentes porque estos son procesos intrínsecos y propios de los seres pensantes.
Ahora se suma la Inteligencia Artificial (IA) que ha llegado para quedarse, ser parte de la cotidianidad y para los nativos digitales será una herramienta más de la vida como lo fue en su momento la computadora o el internet - descubrimientos que cambiaron para siempre el funcionamiento de la sociedad, la economía y la educación y de la IA no esperamos menos-.
El reto para la educación es lograr cultivar en todos sus niveles una sociedad donde el pensamiento crítico prevalezca, las prácticas tan sencillas y al mismo tiempo tan complejas como los procesos de creación, ingenio y originalidad establezcan las diferencias amalgamado a los valores impulsados por Santo Tomás como lo son: "amor a la verdad, excelencia y esfuerzo, fraternidad y solidaridad, respeto e inclusión".
Éste es el inicio de un nuevo capítulo de la humanidad, ante el cual debemos accionar, apropiarnos de las herramientas que nos entregan y el primer paso es actualizar nuestras mallas curriculares e incorporar ramos donde se fomente el conocimiento y buen uso de la IA.
No debemos ver un enemigo, sino un aliado. Tenemos el deber y el compromiso de proveer a nuestros estudiantes de competencias digitales esenciales para que en el lapso de una o dos décadas no pasen a ser un número más en las estadísticas de los desempleados, sino que logren migrar hacia los puestos de trabajo que demanda desde ahora el mercado digital, del big data, protección de datos, entre otros.
El desafío es claro, los objetivos están establecidos, la propia IA tal vez será la responsable del gran salto en la educación, pues parece, que finalmente nos veremos obligado a cambiar el pupitre y el pizarrón por ambientes netamente digitales y donde las neuronas, el alma y el espíritu de cada ser humano marcará la diferencia entre la máquina y el profesional.
José Luis Franco Montaña,
rector Santo Tomás Chillán