Investigan dos denuncias de acoso escolar a profesores
SOLICITUD. Colegio de Profesores indicó que exigen un nuevo marco legal que proteja eficazmente a los docentes en el trabajo que realizan en aula.
El acoso escolar a docentes es una situación que junto con irse volviendo reiterada en el país, va generando preocupación en el mundo educativo. De hecho, la región de Ñuble no está ajena al tema, pues se investigan 2 casos de alumnos que habrían sido denunciados por acosar a profesores, uno en la comuna de Cobquecura y otro en Quirihue. Ellos se suman a otra situación de índole similar ocurrida en Chillán.
Para el presidente regional del Colegio de Profesores, Manuel Chávez, no son pocos los profesores que sufren o han sido víctimas de acoso, amenazas y agresiones; por lo que llamaron a la implementación de medidas que garanticen una mayor protección al gremio docente.
"Estamos pidiendo que en homenaje a la colega Katherine Yoma, se envíe un proyecto de ley que garantice mayor protección a los profesores. Si bien es cierto que están los protocolos y manuales de convivencia, ellos no son suficientes. Nosotros vamos a tener la próxima semana una jornada con la Superintendencia de Educación, la seremi del ramo y las directivas comunales para tratar este tema", aseguró.
Chávez, añadió que "se requiere un marco legal que sea más categórico en esta materia. Esto se conversó con el Presidente Boric, quien se comprometió en ese sentido, por lo que solicitamos que se envíe este proyecto de ley en los plazos correspondientes".
El presidente comunal del Colegio de Profesores, Rodrigo Herrera, contó que precisamente él fue víctima de una agresión en la Escuela Ramón Vinay por un alumno que le propinó una patada en los testículos.
"Quedé absolutamente solo. Denuncié el hecho al director del establecimiento y al DAEM, pero no se hizo absolutamente nada. Estuve solo en la atención médica e incluso, la dupla del DAEM cuestionó los informes médicos. Finalmente, esto se transformó en una burla hacia mí", explicó.
Herrera agregó que el 80% de los profesores de aula son víctimas de este tipo de agresiones, añadiendo que "hay estudios que indican que el mismo porcentaje abandona el sistema y es por esta razón. Estamos desprotegidos y las autoridades se tiran la pelota entre ellos sin hacer nada en favor de los docentes".
Hay que dar señales
Consultado al respecto, el seremi de Educación, César Riquelme, afirmó que regularmente se reúnen con los equipos de los establecimientos educacionales, los DAEM y encargados de convivencia escolar para vigilar que los protocolos se apliquen correctamente en este tipo de situaciones.
"Cada establecimiento tiene que considerar en sus protocolos la agresión a un adulto y las acciones a tomar. También es fundamental proteger la integridad física y sicológica de los profesores porque la convivencia escolar es la base del proceso educativo", dijo.
El secretario regional indicó que el llamado a las comunidades es a empoderarse y tomar las decisiones adecuadas en ese sentido, pues el Consejo de Profesores tiene la autonomía necesaria para realizar acciones apegadas a la ley y al reglamento que ellos mismos han elaborado.
"Los que han sucedido en la región son casos aislados, pero tienen que darse señales al respecto. Nosotros estamos preocupados en ese sentido y monitoreamos cada uno de los casos que se han producido. La ley protege a todos los integrantes de la comunidad escolar", sostuvo.
El seremi César Riquelme comentó que dentro de los protocolos, se incluye que el director del establecimiento respectivo cuenta con 24 horas para denunciar el hecho en las instancias correspondientes. A ello se suma la derivación del caso a la Superintendencia de Educación, quien debe consultar al sostenedor del establecimiento que hizo para proteger al docente agredido.
El lamentable caso de Katherine Yoma
El caso de la profesora Katherine Yoma Valdivia (31) es uno de los más trágicos respecto de este tipo de situaciones. La docente decidió quitarse la vida el pasado 8 de marzo, tras no superar cuadros ansiedad y depresión ocasionados por las constantes amenazas de una alumna de la escuela José Papic Radnic de Antofagasta, donde ejercía como profesora de ingles. La situación ha desembocado en una serie de manifestaciones y exigencias por parte del gremio docente para contar con mayor protección en las aulas, por lo que incluso, los profesores piden que el nuevo marco legal demandado lleve el nombre de la desaparecida docente.