Control de identidad
Ignoro por qué razón al control de identidad se le quiera confundir con detención por sospecha, el primero es rápido y una verificación de identidad no tarda más de un minuto, el segundo data de tiempos donde la tecnología era escasa y para detectives verificar "in situ" una identidad era difícil, pero pese a ello los traslados a cuarteles eran muy acotados.
En tiempos donde la delincuencia arrasa, necesario es dotar de mayores facultades a las policías y poco a poco analogarlas con policías de países desarrollados, por lo mismo, raro es que algunos parlamentarios estén de acuerdo con restricciones policiales que favorecen el actuar de la delincuencia.
Chile debe estar orgulloso de sus policías. La PDI como policía científica investigadora, y Carabineros como policía preventiva, son reconocidas en todo el mundo por su capacidad, profesionalismo y eficiencia, y por lo mismo resulta extraño que parlamentarios que deben velar por la seguridad y tranquilidad de sus electores y habitantes del país transversalmente se opongan a entregarle facultades.
Alberto Contreras Silva
Ley de aborto
Se está discutiendo uno de los temas más importantes del actual período de gobierno: se va a resolver si el país continuará defendiendo el derecho a la vida de todos los seres humanos, o bien, si pasará a ser parte de aquellos que consideran que hay personas cuyos derechos no debe garantizar ni proteger el Estado.
Como historiadora, me llama la atención el viraje de ciertos partidos y corrientes ideológicas en este tema. En los años 60 y 70, cuando desde Estados Unidos y ciertos organismos de la ONU se comenzaron a aplicar políticas de control de la natalidad en los países sub-desarrollados, los partidos de izquierda comprendieron que esta era una forma más de dominio de los poderosos del mundo, y llamaron a cerrar filas contra estas imposiciones.
En toda América Latina, muchos intelectuales denunciaron las políticas antinatalistas procedentes de Estados Unidos que, a cambio de ayuda económica, pretendían frenar la natalidad con el fin de reducir la cantidad de pobres en el mundo. El canto popular de protesta no fue ajeno a esta preocupación, siendo famoso el "Se precisan niños para amanecer", del comunista uruguayo Daniel Viglietti.
Ante la realidad que hoy vivimos, me pregunto: ¿cuál es la causa del giro de 180 grados en esta cuestión? ¿Es que la nueva generación de izquierda ya no cree que la difusión de las prácticas abortivas y otras formas de "control de la natalidad" constituyen una nueva forma de imperialismo? En este debate se nos va la vida o la muerte de nuestra sociedad.
Bárbara Díaz Kayel.
Cambiar la historia
La alerta y controversia se desató en torno a párrafos cuestionados de libros de Ciencias Sociales que distribuye el ministerio; ello nos pone de manifiesto dos aspectos fundamentales. Uno, la falla inexplicable de objetividad, legitimidad e institucionalidad de un Ministerio, el de Educación y segundo, como el Partido Comunista, fiel a sus principios, está en permanente acecho a la caza de incautos, en donde gente de izquierda y de acuerdo a aquello de que el fin justifica los medios, harán todo lo posible por cambiar o tergiversar la historia.
José Manuel Caerols S.
La basura otra vez
De nuevo las normativas medioambientales aparecen como traba del manejo de la basura. Los interesados en el negocio aducen que existen en funcionamiento vertederos con distintas normas a las que a ellos se les exige, los vecinos de Chillán Viejo felices porque se les cumple el anhelo de no pasar a ser la comuna vertedero de la región. Además aparece un concejal que hace hincapié en la capacidad "fiscalizadora" de Estado y que este debe hacer cumplir las normativas. Hasta acá me quedo yo, pensando al final de cuentas que no hay nadie que le ponga el "cascabel al gato", ni el empresario privado, ni la comunidad, ni el Estado tienen una postura responsable sobre como debemos manejar nuestros desechos; unos buscan la maximización de las utilidades del negocio, otros no tener los malos olores de lo que producimos y otros solo fiscalizar haciendo a un lado de la ausencia de "voluntad política" de un Estado que no es tal y que deja que todo se lo maneje los privados y cuando a estos no les renta el negocio lo abandonan y punto.
Olvidando que debiera ser el Estado como sociedad quien en definitiva se haga cargo del manejo apropiado de los desechos como parte de que sus efectos deben ser responsabilidad pública, puesto que afectan la calidad de vida de sus habitantes y su entorno, no debe descargar esta responsabilidad en la "rentabilidad privada" de la basura como negocio y no como responsabilidad social, debiendo principalmente los municipios asumir este rol como también en todo lo concerniente a la calidad de vida de sus territorios y de no existir normas en un estado sin estado ni marcos regula torios.
Enrique Edis Jara Rivera.