Plaza de Armas espera por sus habituales visitantes
CHILLÁN. Si bien las medidas restrictivas son menores, muchas personas mantienen el confinamiento.
Si bien se decretó el levantamiento del cordón sanitario y la cuarentena, muchas personas siguen optando de manera voluntaria por el enclaustramiento o por permanecer en casa si se trata de llamarlo de una manera más amigable. Y un ejemplo de esta situación es lo que ocurre en la Plaza de Armas de Chillán, lugar que por las mañanas luce con una mayor cantidad de gente, pero que durante las tardes luce una soledad que parece tornarse habitual. Los niños son escasos, al igual que los vendedores ambulantes y menos pensar en los artistas que improvisaban su talento.