Lidia del Carmen Llanos Bonilla, (Portezuelo 1932), telegrafista y escritora. Estudió en el Liceo de Niñas de Chillán (1953) y en la Escuela Postal Telegráfica (1954). Hija de Domingo César Llanos y de Mercedes del Carmen Bonilla, cuatro hermanos. Viuda de Edmundo Benjamín A. San Martín Reyno, tres hijos, seis nietos y una bisnieta.
Lidia Llanos, es una de las últimas telegrafistas que quedan en la ciudad de Chillán. Las generaciones actuales, no conocen lo que es un telegrama, ni la desazón e incertidumbre que significaba que llegara uno de esos documentos a nuestras manos sin aviso. ¿Cómo aprendió, Lidia este trabajo?. Fue en Santiago donde ella en casa de parientes estuvo un período de tiempo, para asistir a un curso intensivo y aprender esta técnica que requería rapidez y concentración y en el cual trabajó hasta pensionarse, como Jefe provincial de Telex Chile en la ciudad de Chillán.
Fue en Santiago, en esas estadías de estudios en la casa de sus parientes, de Rubén Azócar Soto y su esposa Leontina Mason, donde comenzó a relacionarse con destacados escritores nacionales. De Azócar tiene autografiado, para ella la obra, Gente en la Isla: "Para Lidia con mi corazón atravesado. Rubén. 1961". En esa casa de Los Guindos, Ñuñoa, se realizaban reuniones donde llegaba Pablo Neruda y Delia Del Carril "La hormiguita" y tantos otros. En la Casa de Michoacán, de Neruda, en la misma comuna, Lidia visitó muchas veces, en grupo, a Pablo y Delia. Ella recuerda: "Pablo sentía un afecto y un cariño muy especial hacia Rubén Azócar, le llamaba, hermano menor". Allí apreciaba las colecciones de Pablo y los dibujos y grabados de Delia. De Pablo Neruda, tiene autografiado el Canto General: "Para Lidia, su amigo viejo y joven". Pablo Neruda, 1961". También en esa casa, conoció a Laura Reyes, hermana del poeta y trabó amistad con Homero Arce, secretario de Neruda. Compartió, en ambas casas, con Angel Cruchaga Santa María, Premio Nacional, casado con Albertina Azócar, hermana de Rubén y novia de juventud de Neruda, musa que inspiró varios poemas de la mundialmente conocida obra: Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Cruchaga, llamaba cariñosamente a Lidia, "mi lirita chilena". De este poeta tiene dos Antologías autografiadas: "Para Lidia, su amigo Angel, 1960".
Por otra parte, Albertina Azócar, pasó largas temporadas junto a su hermana Adelina, en casa de Lidia Llanos, en calle 5 de Abril en Chillán. Otras amistades que llegaron a su casa fueron, Delia Solimano, esposa de Tomás Lago; su vecino Darío Brunet, Premio Municipal; Hilda Ortíz, esposa de Gonzalo Rojas, con quién fueron compañeras de Liceo. Además, tuvo la oportunidad de conocer y conversar con los hermanos Parra más celebres.
Hoy, Lidia Llanos, a sus 88 años, mantiene sus redes sociales, disfruta de actividades culturales, los viajes y su Grupo Literario en Concepción. Residiendo en Chillán y Talcahuano, cultiva la poesía, cuentos y crónicas. Ha publicado dos libros: La telaraña (2011) y Fragmentos de vida (2014) y ha participado de cuatro Antologías, en las que destaca las del Grupo Literario Azul: "Terremoto" (2012). Lidia Llanos, es una mujer extraordinaria, nacida en pleno siglo XX, que prodiga amistad, generosidad, cariño y sabiduría.
Alicia Romero Historiadora.