Andrés Mass Olate
Una de las principales características de Ñuble, es su alta ruralidad, la que alcanza el 30,6%, convirtiéndola en la región con mayor porcentaje de población rural del país. Lo anterior facilita la práctica de la agricultura y de la ganadería, la que se amenazada por antisociales que amparados en la noche y aprovechando la extensión y soledad de campos y paraderas, se dedican al abigeato o robo de ganado o caballares.
En comparación a agosto del 2019, este delito cayó este año en un 12%. Según información de la Sección de Investigación Policial (SIP) Abigeato de Carabineros, durante agosto del 2019 se recibieron 100 denuncias, mientras que este año en el mismo lapso se llegó a las 88.
De ese total, 50 se registraron en la Caprovincia de Punilla, 25 en Diguillín y 13 en Itata. En tanto, las comunas donde se produce generalmente el delito son e San Carlos, Ñiquén, San Nicolás, San Fabián, Coihueco, El Carmen, Bulnes, Quirihue.
Respecto a las causas de la disminución de las denuncias, desde la policía uniformada, junto a los constantes patrullajes que realizan, atribuyen la situación a la pandemia y las medidas restrictivas de la movilidad que debido a ella se han implementado a nivel país.
"El mando zonal se encuentra al tanto de las tendencias y el estado de emergencia que se encuentra el país. Ello podría afectar el actuar de los delincuentes de este delito, en cuanto al toque de queda, pues este podría darnos una ventaja debido a que baja considerablemente el tránsito de personas, lo que hace más fácil el control de desplazamiento de personas", precisó el suboficial mayor Claudio Pérez, jefe de la patrulla de la Sección de Investigación Policial (SIP) Abigeato en Ñuble.
Estrategias
Conscientes de la importancia de la prevención y la investigación de este tipo de delitos, Carabineros de Ñuble cuenta desde 1998 con una unidad especializada en abigeato, la que tiene actualmente su oficina en la primera comisaría de San Carlos, y cuenta con una dotación de tres funcionarios, quienes recorren las 21 comunas de la región de Ñuble.
No obstante, debido a la geografía y a la gran ruralidad, la policía uniformada, junto al trabajo preventivo orientado a patrullajes, controles vehiculares y fiscalización, desde el 2019 se intensificó el trabajo preventivo de abigeato, especialmente, en las estrategias donde hay trabajo en equipo con la comunidad, dando origen a un plan regional para enfrentar de mejor este delito.
"De hecho, en esa línea se incentivó la creación de juntas de vigilancia rural, las cuales generaron su personalidad jurídica y postularon muchas de ellas a los fondos de Seguridad Pública. Lo anterior con el objeto de implementar luminarias, cámaras de vigilancia, radios y otros sistemas que le permitiera a los vecinos mantener mayor contacto en zonas donde cada vecino se encuentra por lo menos a medio kilómetro de distancia", destacó el general Mario Sepúlveda, Jefe de la XVI Zona de Carabineros de Ñuble, puntualizando además que "el plan también nos permitió organizarnos con los vecinos y motivarlos a que fortalezcan su autocuidado".
Fiestas patrias
Una de las épocas donde hay mayor ocurrencia de abigeato es en las festividades patrias, donde se incrementa el consumo de carne. Por lo anterior, es que la policía uniformada asume el compromiso de dar seguridad en los campos de las 21 comunas, antes, durante y después de dichas celebraciones. "Para ello divide la región en dos partes, zona sur y norte, siendo la división el Río Ñuble, agrupando el personal de las secciones de investigación policial en dos y el personal de población efectuando patrullajes diurnos como nocturnos", detalló.
Para que un animal pueda ser vendido tanto en el mercado nacional como internacional, debe estar identificado y registrado, condición que es verificada por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), evitando de esa manera la llegada de carne que pudiese dañar la salud de la población.
En ese sentido, Eduardo Jeria, director del SAG en Ñuble, precisó que la institución (SAG) tiene la facultad de estar controlando la identificación a través de los dispositivos de identificación electrónica en cada uno de los animales vacunos, lo que permite su trazabilidad. "Es decir dónde están, quienes son sus dueños, lo que se controla tanto en las ferias como los mataderos, no solo para el mercado nacional e internacional. Además tiene que registrarlos en el Sistema de Información Pecuaria del SAG, todas las cuales resultan medidas muy importantes para controlar el abigeato", explicó Jeria, quien llamó a la comunidad a evitar comprar carnes de origen desconocido, "ya que no está con inspección médico veterinaria por lo que no garantiza que sea un alimento que no le cause daño a la salud", sentenció.
88 denuncias por abigeato ha recibido carabineros en agosto, un 12% menos de lo acontecido en igual lapso del 2019.
50 de las denuncias se presentaron en la provncia de Punilla, 25 en la de Diguillín, y 13 en la de Itata, respectivamente.
1998 es el año en que Carabineros creó la patrulla de abigeato, cuya oficina se encuentra en la 1° Comisaría de San Carlos.