Sus problemas físicos, que terminaron afectando su rendimiento, sumados a la regularidad en el juego del ruso Karen Khachanov (16º ATP), acabaron con el sueño del chileno Cristian Garin (19º ATP) de avanzar, por primera vez en su carrera, a los octavos de final de Roland Garros y protagonizar una esperada revancha ante el serbio Novak Djokovic, luego de caer a inicios de año ante el número uno del mundo en la ATP Cupa. Al final, vivió una caída por parciales de 2/6, 6/3, 4/6 y 2/6 frente al europeo, en dos horas y media de juego, que lo despide tempranamente del tercer Grand Slam de la temporada.

Frío arranque

No fue cómodo el inicio del chileno en el partido. Con un bajo porcentaje de primeros servicios, la tarea de un comienzo se hizo complicada para Garin, quien cedió tres veces su servicio para darle al tenista ruso la primera manga con un contundente 6/2.

El segundo set encontró al chileno mejor asentado con sus golpes y más regular en su servicio, lo cual hizo de este episodio el mejor en cuanto a rendimiento para el ariqueño, quien se aprovechó de las dudas de Khachanov para quebrar el servicio del ruso en el sexto game, gracias a un error no forzado del europeo.

El tercer capítulo fue bastante parejo, hasta el sexto juego, cuando el físico de Garin empezó a flaquear y nuevamente cayó en una laguna con su servicio que le complicó bastante para mantenerse en ritmo ante el actual número 16 del mundo. Así las cosas, fue en el octavo game donde Khachanov apretó el servicio del chileno para quebrarle en cero. Para suerte del nacional, su respuesta llegó de inmediato, al quebrar por primera vez al ruso en la manga y quedar 5/4 abajo. Sin embargo, un nuevo quiebre de servicio, y la asistencia médica solicitada por Garin, cerraron el episodio en favor del ruso.

Disminuido físicamente, tras ser atendido por problemas en la cadera, la cuarta manga fue un ir y venir de intenciones de Garin frente a la contundencia de Khachanov que en 27 minutos sacó al nacional del torneo gracias a los quiebres de servicio en el sexto y octavo game.

4 derrotas con la de ayer, suma Garin en canchas de arcilla, donde es el segundo mejor jugador del año con un registro de 15-4.

8:00 horas la única chilena en el torneo, Alexa Guarachi, juega hoy el dobles con Desirae Krawczyk ante Su-Wei Hsieh y Barbora Strycova.

Una semana inolvidable cerró ayer la tenista paralímpica chilena Macarena Cabrillana (17° ITF), quien se consagró campeona del French Riviera Open, en Francia, tras derrotar en la final a la holandesa, exnúmero uno del mundo y vigente campeona olímpica Jiske Griffioen (48º ITF) por parciales de 6/3, 4/6 y 6/4.

La raqueta nacional, que ya se había consagrado en la competencia de dobles el viernes con la británica Lucy Shuker, tras vencer en la final a las japonesas Saki Takamuro y Manami Tanaka, jugó a gran nivel ante Griffioen, asegurando así su segundo título de la ITF de este año, donde aparte de ganar el Miguel Zúñiga Memorial Open, en Argentina, alcanzó semifinales en el Toyota Open International de Ile de Re y el Arizona Open.

La victoria de la nacional la llenó de elogios, como el que le entregó la ministra de Deportes, Cecilia Pérez: "Felicitar la espectacular semana de Macarena Cabrillana, consiguió su primer triunfo ante una Top Ten. Campeona en singles y dobles del Riviera Open. Otra mujer chilena que es ejemplo de lucha, resiliencia, talento y que no tiene techo entre las mejores del mundo".

"Esto realmente es increíble, ganar a una jugadora increíble, una numero uno del mundo, la verdad que esto fue mucho", dijo la chilena, quien reconoció haber trabajado "muy duro para llegar acá".

"Este es mi tiempo, estoy feliz. He trabajado realmente duro para poder conseguir esto, porque cuando juegas ante las mejores es importante estar bien preparada y luchar por cada punto. No sé qué pasará ahora, es como un sueño. No sé si es real, pero lo amo y disfruto estar aquí. No puedo más de la felicidad".

El italiano Filippo Ganna (Ineos), reciente campeón mundial de contrarreloj, voló ayer en la cronometrada que abrió la edición 103 del Giro de Italia, de 15,1 kilómetros, entre las localidades de Monreale y Palermo, en la sureña isla de Sicilia, y de paso se enfundó la camiseta rosa de líder de la clasificación general.

En una carrera marcada por el fuerte viento, que dificultó el trabajo de los corredores, Ganna estrenó su maillot arcoíris y marcó un tiempo de 15 minutos y 24 segundos, al acabar con una ventaja de 22 segundos sobre el segundo, el portugués Joao Almeida (Deceunick Quick Step) y el tercero, el danés Mikkel Bjerg (UAE).

Un giro accidentado

El mayor inconveniente del día lo protagonizó el colombiano Miguel Ángel López (Astana), víctima de una grave caída al resbalar en un bache y que debió ser trasladado en ambulancia a un hospital de Palermo.

El equipo Ineos fue el más brillante en la etapa, con el británico Geraint Thomas que, con su tiempo de 16 minutos y 46 segundos se hizo con una ventaja de 26 segundos sobre su compatriota Simon Yates (Mitchelton Scott), de 57 sobre el ruso Aleksandr Vlasov (Astana), 1:06 sobre Vincenzo Nibali (Trek Segafredo) y 1:24 sobre el danés Jakob Fuglsang (Astana), para arribar en el cuarto lugar de la clasificación.

La alegría de ganna

"Sabía que era uno de los favoritos. Traté de mantener la calma y la concentración y al final lo conseguí. Es un resultado fantástico y una gran emoción la de vestir la camiseta rosa en mi primer Giro", afirmó el italiano, quien confirmó en ruta su favoritismo. "He salido bien del Mundial y mañana (hoy) saldré con el maillot rosa. Y eso que hasta hace algunos años el Giro solo lo veía por televisión", agregó Ganna.

Con más de cuatro meses de retraso con respecto a sus fechas habituales, el Giro echó a andar con una contrarreloj exigente disputada en Sicilia, isla que reemplazó la salida inicialmente prevista desde Hungría y que será el teatro de las primeras tres etapas.