No para de ganar y, por otra parte, pareciera que no hay cómo ganarle. Es el presente de Tomás Barrios, tras brillar y consagrarse campeón en San Luis de Potosí y luego en Florianópolis. Hoy, el chillanejo, la tercera mejor raqueta del tenis nacional, va por un desafío que, de ganarlo, lo meterá en los cuartos de final del Challenger de Praga.El partido será contra el dueño de casa, el checo Vit Kopriva, 166 del mundo, a quien el "Gigante de Ñuble" buscará doblegar para meterse entre los 8 mejores. Barrios accedió a la instancia de octavos de final gracias al sublime triunfo del día lunes que tuvo en su debut, barriendo en dos sets seguidos.

Su víctima en ese entonces fue el moldavo Radu Albot, 103 del mundo, a quien derrotó por parciales consecutivos de 6-3, en lo que fue el primer partido del chillanejo tras consagrarse campeón en el Challenger de Florianópolis, donde derrotó a su gran amigo Alejandro Tabilo.

Tomás Barrios ha vivido un auténtico renacer desde su operación de rodilla del año pasado. El actualmente 133 del mundo suma 11 partidos seguidos sin perder. Entonces, yendo hoy por la doceava victoria consecutiva, Barrios ya consagró esta como la mejor temporada de su joven carrera. Es más, su padre, que en reiteradas veces ha comentado su actualidad con Crónica Chillán, ha afirmado contundente y repetitivamente que Barrios lleva años esperando un momento como este. El triunfo junto a Tabilo por la Copa Davis marcó un antes y un después en Barrios, que goza de un presente deportivo que lo tiene aspirando cada vez a más.

La historia de los Diablos Rojos sumó anoche, desde las 18 horas, un nuevo hito en su existencia. De local contra Aucas en Concepción, Ñublense buscaba sumar sus primeros 3 puntos en la primera Copa Libertadores de la vida del hincha chillanejo.

Los de Jaime García no llegaban bien dentro de lo global al duelo, eso es un hecho. La victoria sobre Palestino del pasado fin de semana fue un tanque de oxígeno para un elenco color sangre que busca la consolidación de su mejor cara futbolística.

Al frente, un cuadro ecuatoriano que sabe de triunfos en "La Li". El elenco dirigido por César Farías, apodado como "el José Mourinho de Latinoamérica", ganó en su primer partido a Flamengo, verdugo del rojo en la segunda fecha. Por lo mismo, sumar de a 3 era imperativo anoche.

Así, apenas 15 minutos se demoró el Rojo en hacer peligro. A los 10, Juan Leiva metió un pase largo que no pude ser conectado por Pablo Aránguiz y que se estrelló en el palo. Cinco más tarde, el mismo atacante diestro avisó con un remate de distancia que se fue desviado.

Sin embargo, para la desdicha de Jaime García y los suyos la apertura de la cuenta fue para la visita. El otrora delantero de Huachipato, Rómulo Otero, batió a Nícola Pérez con un golazo desde fuera del área. 0-1, y Aucas no llegó más. Se fueron con este resultado al entretiempo.

A la vuelta para el complemento, Jaime García dispuso de los ingresos de Campusano por Rebolledo y de Andrés Vilches por Zalazar. El Rojo, que ya buscaba como fuera el empate, se iba con todo el poderío ofensivo con el que podía contar.

El partido se jugaba casi por completo, producto de algunos contraataques, en el campo del elenco visitante. Al minuto 74, Patricio Rubio tuvo la igualdad tras una gran jugada personal, caño en el área incluido. Pero Frascarelli desvió su bombazo. Cuatro minutos más tarde, eso sí, el "killer" facturó, y el "Pato" batió la valla rival con un derechazo cruzado. Golazo y 1-1.

Y como el fútbol ha sabido cruel con Ñublense, también supo cuándo tenía que retribuirle el esfuerzo a Ñublense. Byron Oyarzo, al minuto 91, comandó un contraataque que Andrés Vilches clavó al ángulo del primer palo. Golazo, 2-1 y tres minutos de aguantar, dando paso así a uno de los hitos más significativos en la historia del club: su primer triunfo en Libertadores.

Tras el encuentro, García declaró que "creo que esa fórmula la hemos tenido siempre. Hemos fallado en goles puntuales y nos han marcado goles inocentes y de jugadas que no nos marcaban normalmente. Mantuvimos tranquilidad ante un gran rival que provoca mucho desorden y es equilibrado en todos los frentes, pero tuvimos paciencia y capacidad", dijo el líder del Rojo.