"Acepté que ser una oveja negra está bien y que ahí están mis fortalezas"
Agencia EFE
La cantante y actriz chilena Maida Larraín, de nombre artístico Maida La Reina, se cataloga a sí misma como una "oveja negra" que canta contra los estereotipos y anima a las personas.
En conversación con EFE, la también hija del cineasta Ricardo Larraín quiere, con sus letras, encontrar una "verdad personal" que represente genuinamente a cada uno, más allá de las "demandas externas" de la sociedad.
"Esa verdad personal ha sido aceptar que ser una oveja negra está bien y que, en ella, están mis fortalezas", explica, orgullosa.
La chilena, que vive en México desde hace cinco meses, saca de su mochila personal su nuevo álbum, "La Reina", del que destaca la canción homónima, un clamor para que sus seguidores "inventen su reino".
"Viene a decir que tú eres la reina de tu vida, 'siéntate en el trono que te apetezca'", exhorta.
También de su particular maleta desentierra el acoso escolar que sufrió de pequeña, cuando un compañero la menospreciaba "porque no pesaba lo mismo que las demás niñas" y, a su mejor amigo: "por gay".
"Lo defendía llorando y sin entender por qué alguien maltrataba a otros por algo que él inventó que era así", una situación que le provocó "mucha inseguridad" en sí misma, según cuenta.
Sin embargo, este acto despertó en Larraín "cosas muy hermosas", aunque admitió que en aquel momento no lo supo ver, como el gusto por la guitarra o la escritura.
Al descubrir que "era buena amiga y que tenía capacidad de escuchar", agradeció la experiencia que la "hizo más fuerte".
Aunque, años después, cuando estaba embarazada, no le permitieron volver a participar en la obra de teatro donde actuaba "porque había subido de peso".
"En vez de rendirme, dije 'no, esta es mi fortaleza. Aquí estoy, vamos a cantar sobre eso, a hablar con otras mujeres y ver que, a muchas, les pasa'", relata.
feminismo unisex
Precisamente, una de las luchas caudales de la carrera de Maida La Reina es la feminista, donde tanto hombres como mujeres "están juntos" para "derribar" al patriarcado, dijo.
"Los hombres que son criados en el machismo: tienen que ser 'machitos', no pueden llorar, tienen que beber alcohol... Un montón de cosas que no les dejan ser", dice.
En consecuencia, dedicó la canción "Grítalo conmigo", también de su nuevo disco, a los hombres, para que se unan a la ola feminista, que sostiene "libera un montón".
"¿Por qué un hombre es golpeador? Quizá está tan reprimido, desde sus inicios, que nunca pudo llorar, expresar una emoción más femenina o más sensible", lamenta.
Una situación que conduce a "expresarse a través de la rabia, lo único que se les permite", por lo que la "cantactriz" apuesta por "arreglar" el problema "desde el inicio".
amigas y compañeras
Un mes y medio después de llegar a México, Maida La Reina se integró al coro El Palomar, un conjunto de cantautoras radicado en la capital, donde conoció a "26 amigas, hermanas y compañeras".
"Ha sido un regalo inmenso en este momento de mi vida", sonríe, porque el grupo es un "nido de amor femenino" para un colectivo, el de las cantautoras, que "es bien solitario".
Uno de los momentos que Maida La Reina recuerda con más cariño es el concierto que El Palomar dedicó a las madres buscadoras mexicanas el pasado 19 de mayo, que agotó las entradas y se erigió como un "show inolvidable".
"Eligieron este colectivo porque El Palomar intenta visibilizar casos de mujeres que, a lo mejor tienen poca tribuna", desgrana.
La chilena participó semanas atrás en la actuación del Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+, pero también tiene en mente actuar en un recinto tan mítico como el Foro del Tejedor, en Ciudad de México, durante el año 2025, con el convencimiento de que "no pertenecer al rebaño" es algo "perfecto".
"A lo mejor, hay un montón de ovejas negras que andan solas y que se pueden juntar también, ¿no?", reflexiona.
"La Reina" trata del cuarto álbum de estudio de la artista, el que fue producido en Santiago entre el 2022 y 2023 por el productor Felipe Choupay, conocido por trabajar con artistas como Jonas Sanche o Joe Vasconcellos.
En el disco se destacan diferentes ritmos y géneros, viajando entre los sonidos tropicales, melodías pop y "las experiencias de una mujer latina decidida".
Larraín vivió más de 10 años en España y gran parte de su carrera se desarrolló fuera de Chile. Si bien inició su carrera plenamente como actriz, en 2016 tuvo su debut en la música con "Lo poco que sé", un disco donde cantó valses peruanos, zambas argentinas y boleros, mezclando diferentes sonidos latinoamericanos. Tras aquel primer álbum, la cantante presentó su obra en el Teatro Nescafé de las Artes en 2017.
"Los hombres criados en el machismo no pueden llorar (...) no les dejan ser un montón de cosas".
"Hay un montón de ovejas negras que andan solas y que se pueden juntar (...) es algo perfecto".