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Consulta Ciudadana
Señor Director:Es indiscutible el liderazgo que han ejercidos los alcaldes en esta crisis, y la población ya está respondiendo. Según la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM), 225 comunas a lo largo del país han puesto a disposición de la ciudadanía algunas modalidades, ya sea online, presencial o ambas. Al 12 de diciembre, 123 mil personas habían votado de manera online, en 23 comunas.
Independiente de la forma, lo relevante es que la opinión de los habitantes es una oportunidad para mejorar su calidad de vida. Se ha abierto una puerta, es deber de la sociedad y sus representantes mantenerla en esa condición. Es por esto que hoy resulta clave concientizar y motivar a más personas a votar de forma oportuna, tanto en la Consulta Ciudadana como en el Plebiscito Constitucional. Esto para generar información relevante sobre las prioridades locales y nacionales, como insumos del proceso constituyente a 2020.
Para nuestra fundación es fundamental, que la ciudadanía se pronuncie respecto de esta pregunta ¿Está usted de acuerdo o en desacuerdo en que los municipios tengan más atribuciones y recursos? porque desde nuestro quehacer vemos y denunciamos la desigualdad territorial, las asimetrías institucionales y la falta de recursos, tanto económicos como humanos que sufren muchos territorios y municipios del país, de eso hablamos cuando llamamos a participar, en definitiva es a sumar fuerza para cambios estructurales que nos permitan caminar al desarrollo.
¡El llamado es a utilizar todas las plataformas para cumplir con nuestro deber y aprovechar esta oportunidad histórica para Chile!
Gonzalo Vial, Director Ejecutivo Fundación Huella Local.
Acusación Constitucional
Señor Director:La acusación constitucional al Presidente de la República y la furia de los parlamentarios de oposición que votaron en contra colgando carteles con las caras cual malhechores de viejo oeste, "se busca", es lo peor de la política. La hilacha política les cuelga hasta las verijas, entendiendo nada los movimientos sociales y sus males, siendo que, la mala clase política refugiada el parlamento son los principales culpables. No en vano, tiene una aprobación de un miserable 10%. No están moral ni políticamente en condiciones de criticar a quienes no votaron avalando sus caprichos, orden de partido o presiones políticas.
Precisamente son esas prácticas las que rechaza la ciudadanía de conductas de cartel, que significa el quiebre institucional de proporciones con las más graves consecuencias políticas, económicas y sociales. La salida del Presidente produce un vacío de poder, el mejor escenario para el anarquismo, grupos violentistas, lumpen, narcos, llegan las pasadas de cuentas, la noche de los cuchillos lagos y los cristales rotos, cercano a una guerra civil.
Un gobierno acéfalo y la desconfianza económica es la primera víctima: fuga de capitales, paralización de las inversiones, cesantía, inflación, acaparamiento, tipo de cambio a las nubes. En ese contexto enrarecido hacer una elección es un tiro al aire y más cuando se busca una nueva constitución. Es la tormenta perfecta. Un nuevo gobierno a la carrera de caballo de bandido, sin programa, sin equipo, sin nada para formar el nuevo gobierno, ministros, subsecretarios, seremis, jefes de servicios, intendentes, embajadores, todo el aparataje del Estado y de gobierno con miles de funcionarios de confianza. Se crea un monstruo de cien cabezas.
Por mucho que a Piñera lo encuentren un carajo y mal gobernante, se tiene que defender el cargo del presidente, la institución de la Presidencia, el poder ejecutivo, que están por sobre los caprichos y los mezquinos intereses políticos. Chile está primero y el Presidente requiere una segunda oportunidad, si tiene que terminar su Gobierno gateando, que lo haga. No podemos permitir como otros países desprestigiados de la región, que los Presidentes salen por las letrinas del palacio de gobierno.
Alfredo Schmidt Vivanco.
La Moneda de pie
Señor Director:Tras una semana intensa en la arena política, La Moneda sigue de pie. Algunos intentaron, mediante afirmaciones vagas, infundadas, mal intencionadas, utilizando juicios aún inconclusos, dar la estocada final. Tomar como punta de lanza las violaciones de DDHH cometidas por agentes del Estado -que de paso, hay que reiterar que deben ser investigadas y sancionadas con firmeza a sus responsables- pero endosar aquello al jefe de Estado, sea por acción u omisión, es una afirmación gravísima e irresponsable.
El actual gobierno fue electo con más de 3 millones de votos, un 54% del electorado. Intentar una acusación constitucional con afán de generar un vacío de poder ante un gobierno electo democráticamente, no es ser un defensor de la democracia, es poner en la mesa mi agenda y utilizar todos los mecanismos posibles para golpear el tablero y girarlo a mí conveniencia, sea como sea.
José Luis Trevia.